lunes, octubre 16, 2006

La película de la quincena: Wall Street


Wall Street es la película que nos revela el fantástico personaje de Gordon Gekko como el arquetipo del asqueroso capitalista inmoral, frío, manipulador y especulador, que cree que todo en la vida está sujeto a transacción. Reconozcámoslo: en cierta manera, tiene razón.

Gekko es el especulador nato, que no crea nada, sólo posee. Su discurso en la asamblea de accionista a favor de la codicia es el verdadero Sermón de la Montaña para todos aquellos que hacen del mercado de valores un campo de batalla atractivo y peligroso. La secuencia de la oferta hostil a su adeversario es verdaderamente mitológica.

Sin embargo, la historia se centra en un caso de espionaje industrial y sobre las consecuencias que conlleva el jugar con fuego para los advenedizos e inexpertos wannabe que se arrastran por convertirse en un clon de Gekko. Por tanto, la película intenta conducir a la reflexión sobre la ética corporativa. No olvidemos que es obra de Oliver Stone. ¿Logra su objetivo? Gekko termina tras las rejas, pero su aprendiz termina de nuevo en el pozo de los mediocres. Pero ¿quién se atreve a apostar que Gordon no volverá nuevamente por más?


Citas memorables de Wall Street:


Gekko: The richest one percent of this country owns half our country's wealth, five trillion dollars. One third of that comes from hard work, two thirds comes from inheritance, interest on interest accumulating to widows and idiot sons and what I do, stock and real estate speculation. It's bullshit. You got ninety percent of the American public out there with little or no net worth. I create nothing. I own.

Bud: How much is enough?
Gekko: It's not a question of enough, pal. It's a zero sum game, somebody wins, somebody loses. Money itself isn't lost or gained its simple transferred from one perception to another.

Bud Fox: If your enemy is superior, evade him. If angry, iritate. If equally matched, fight, and if not split and reevaluate.

Gekko: Every battle is won before it is ever fought. Sun-tzu, The Art of War.

Lou: A man looks in the abyss, there is nothing staring back at him. At that moment he discovers his character. That keeps the man out of the abyss.

Gekko: I know of no more valuable commodity than information.

Gordon Gekko: You see that building over there? I bought it three years ago. My first real estate transaction. I sold it ten months later and made $800,000 profit. It was better than sex. At the time it was all the money in the world. Now it's a day's pay.

Gordon Gekko: The point is, ladies and gentlemen, that greed, for lack of a better word, is good. Greed is right. Greed works.

jueves, octubre 05, 2006

Reseña. "Gestionar con imaginación"

En una nota de prensa, publicada en el diario El Nacional el miércoles 15 de febrero de 2006, a raíz de la colección "Líderes del Management", titulada "En los negocios triunfan los que experimentan hasta innovar", se reseñaba el libro "Gestionar con imaginación" del consultor, conferencista y "gurú de gurús" Tom Peters, Doctor en Ciencias de la Decisión y Comportamiento Organizacional, egresado de la Universidad de Stanford.

El artículo, suscrito por Dulce María Rodríguez, dice lo siguiente:

"La estrategia en una organización es la forma en que ésta actúa en todo momento, es un patrón de comportamiento constante y no una variable ajustable que podría o debería actuar ante un entorno cambiante, de un año a otro.

Independientemente del enfoque empresarial hacia la satisfacción total del cliente, a la innovación o al valor del esfuerzo de todo el personal, las habilidades se constituyen en el 'motor' de la estrategia y lo que diferenciará a las empresas a la hora de hacer negocios. 'Las empresas ganadoras están gobernadas ante todo por una pasión de una u otra forma canalizada, que persigue la creación y el mantenimiento de habilidades diferenciadoras'...

Peters, en los artículos que compila la obra, hace incapié en las habilidades que marcan la diferencia y que surgen después de aplicar la constante 'prueba, hazlo, falla, aprende, vuelve a probar y sigue con ello'...
"

Peters considera que un líder debe ser proactivo, buscar a los empleados, escuchar y actuar, porque las mejores ideas vendrán siempre de ellos. Los empleados deben estar motivados, ser entusiastas y trabajar ante todo con pasión, para mantener las habilidades diferenciadoras que los hacen ganadores. La esencia de la innovación radica en declararse obsoleto desde el interior de la empresa y erradicar los viejos pensamientos:

"Hay que vender las ideas comerciales más sofisticadas para ejercer total presión sobre sí mismo y forzar la dependencia de los nuevos éxitos para alcanzar triunfos".

Rodríguez sostiene que,

"Como defensor de los fracasos rotundos y maestro del entusiasmo corporativo... Peters propone que se contrate 'renegados'; es decir, aquellos emprendedores de mente brillante que hayan hecho algo fascinante y tengan ideas innovadoras, que los finnacie y proteja... que celebre sus fallos, pues estos son la auténtica esencia del aprendizaje, crecimiento y éxito.

Asimismo, recomienda la orientación del proyecto, en el que equipos multidisciplinarios trabajen alineados hacia un mismo propósito y si puede incluir clientes y proveedores mejor, porque ellos inyectarán urgencia y acelerarán el proceso
".

Peters defiende una actitud de permanente disposición al cambio. El activo de una empresa no son sus bienes, sino que "reside en las cabezas y corazones de los empleados, quienes crean nuevos productos, proyectan una mejora continua, lealtad hacia sus marcas y se relacionan con clientes y extraños..."

El futuro de las empresas está en la creación de unidades de negocios de dimensiones moderadas para entrar en contacto con el cliente, saber qué quiere y satisfacerlo... Cada unidad de negocio debe desarrollar 'Proyectos Boom', aquellos que dejan huellas y te hacen una estrella.

Capítulos del libro:
La estrategia sigue a la estructura. El modo de actuar de una empresa es su estrategia y el "motor" de su enforque empresarial son las habilidades que lo diferenciarán a la hora de hacer negocios.

Innovar o morir. Comenzar todo de nuevo o vender lo que haya sido exitoso, para ejercer total presión sobre sí mismo para forzar la dependencia de los nuevos éxitos.

El mundo según Tom Peters. Las empresas tendrán que dividirse en pequeñas unidades de negocios, trabajar en proyectos por equipos para innovar y acercarse y satisfacer al cliente.

El proyecto Boom. Los equipos de trabajo deben ser multidisciplinarios y desarrollar proyectos que añadan valor.

Las verdaderas confesiones de Tom Peters. En "In Search of Excellence", Peters llegó a los principios básicos de la búsqueda de la excelencia: estrategia, estructura, sistemas, estilo, valores compartidos, personal y habilidades...

Los principios de Peters. La experimentación como prioridad. Cuando hay muchas cosas alguna funciona. Lo esencial del éxito de una empresa es su índice de fracasos.Una compañía innova para beneficiar a sus clientes y trata decentemente a sus empleados.

Abraham Pulido, Presidente de Abraham Pulido y Asociados, en un artículo denominado "Imaginación en la gerencia" dice lo siguiente:

"Tom Peters, llamado el 'Rey de lo obvio' por algunos y el 'Gran Gurú de la Gerencia Moderna' por otros se define a sí mismo como el rebelde sin causa de los cambios de la organización empresarial de los últimos tiempos. Se atreve a proclamar entre sus controversiales máximas la 'celebración de los errores' como el método más rápido y eficiente para crear la cultura de los cambios en tiempos perturbadores.

Peters, en el libro Gestionar con imaginación arremete contra la 'estrategia racional de planificación' como la única razón de la ceguera de los que no vieron venir los grandes cambios en el mercado en los últimos años. 'Nadie dice en su lecho de muerte que cuadraron perfecto los últimos 73 trimestres seguidos (...) habla de sus experiencias más extraordinarias y esas siempre fueron riesgos (...)'...

Es la inteligencia emocional la que manda y no solamente la racionalidad de lo conocido. Alguien con visión de futuro y sin miedo a la 'incertidumbre' tuvo que defender con mucha pasión una idea innovadora.

Peters asegura que son 'esos bichos raros' visionarios los que entienden las tendencias y los nuevos caminos... Los que promueven la idea de que 'cuanto antes cometa sus primeros 5000 errores, antes podrá corregirlos'. Así de sencillo, haga, equivóquese, aprenda, trate otra vez y siga adelante...

...la estrategia no está en los grandes planificadores corporativos sino en los más bajos niveles de la organización donde deben triunfar los valores del cambio, la responsabilidad propia, el conocimiento profundo del producto y de la empresa. de nada valdrían cientos de papeles de trabajo que incentivan la innovación si la cultura de la empresa no cambia. ¿Y qué es la cultura de la empresa? La manera en la cual la recepcionista atiende el teléfono, el talante que impera en el departamento de atención al cliente al recibir la aireada protesta de un consumidor o la tolerancia hacia la crítica de un miembro del equipo. 'Dios está en los detalles' y allí es donde hay que cambiar la manera de ver el negocio.

El líder innovador protege y desarrolla a los 'diferentes' ante la amenaza burocrática... Diría Tom Peters: 'No hay tiempo que perder: innovar o morir'.

La humildad ante los cambios es otra de la virtudes de la gerencia con vocación innovadora...

El líder de una empresa debe ser hoy, un creador de habilidades competitivas y 'culturas hacia dentro' que distingan su organización.

...¿cómo convertir a toda la organización en innovadora? Creando culturas organizativas que alojen naturalmente ideas nuevas, estableciendo la cultura del resultado, del riesgo, de la observación del mercado, de la mejora continua, de la celebración de los errores, de la inclusión del consumidor final en las decisiones diarias. Así, se cambia la historia de una organización y se garantiza la vida eterna en el mercado
".

martes, octubre 03, 2006

La película de la quincena: Risky Business

"Joel tiene todas las usuales fantasías adolescentes... carros, chicas, dinero. Cuando sus padres se van por una semana, todas sus fantasías se vuelven realidad"

Así rezaba una de las líneas promocionales de la película Risky Business, de 1983, protagonizada por Tom Cruise (en el rol de Joel Goodson, nombre increíblemente simbólico e insuperablemente puritano) y Rebecca De Mornay (en el papel de Lana, la chica mala).

Joel es el típico chico bueno de un suburbio cualquiera de clase media alta, de cualquier ciudad promedio de Norteamérica. Rodeado de todas las comodidades y facilidades que la próspera vida burguesa puede darle, también ha sido educado con la ideología puritana que perpetúa ese mundo de abundancia y decencia.

Un fin de semana, sus padres se aventuran a dejar al ya "hombrecito" sólo en su casa, con el fin de que demuestre el nivel de responsabilidad del que es capaz. Es el tipo de prueba que todas las familias contemporáneas de clase media tienden a hacer a sus vástagos, con el riesgo de que les tumben la casa y hagan cualquier cantidad de locuras, para que, uno, los padres se sientan contentos (a pesar de los líos por el desastre) de que su hijo demuestre iniciativa a la hora de formar el reventón; y segundo, probarlo, soltarle la cuerda, testearlo a ver que tal responde frente al (tarde o temprano) rol de jefe de la casa. Capaz que hasta consientan en la pérdida de virginidad del chiquillo durante ese tiempo, en una complicidad muy paternal. Aunque todo sea puesto bajo silencio y disimulo.

Joel se deja llevar por los consejos de sus amiguitos de clase media, tan bachillerato-aspirante-al-college como él. Le aconsejan que alquile los "servicios" de una chica, que haga fiestas en su casa, que se vuelva loco en esa semana de liberación... Que lo mande todo al carajo.

Después de tanto pensarlo, Joel se decide. Pero las cosas no necesariamente salen a pedir de boca. Se enreda con la chica mala, se mete en negocios riesgosos, gana cantidades inmensas de dinero como chulo por una noche, pierde la oportunidad de ir a Harvard, ganando el chance para optar a la Universidad de Illinois (irónico). Pierde el dinero que el pimp (chulo) de Lana le quita mañosamente. Todo eso en el tiempo exacto de una semana.

Lo más atractivo del film es el final. Sin moralejas... No, con una "mala" moraleja: Joel termina prestando sus caros servicios sexuales, ganado hasta $ 8.000 por noche. Nada mal. ¿Qué mejor muestra de la moralidad más genuina del empresario capitalista? Lánzate, toma riesgos. La reflexión ética poco importa. Importa el cálculo, y el control de la oportunidad, aprovecharla al máximo, los resultados. Tal y como se expresa Joel acerca de Lana en una de las líneas con menos desperdicio del guión:
It was great the way her mind worked. No guilt, no doubts, no fear. None of my specialities. Just the shameless pursuit of immediate gratification. What a capitalist.



Sin más que decir, dejo a continuación las frases más citables de esta espectacular película (extraídas de IMDB, como es costumbre):
Joel Goodson: [voiceover] The dream is always the same. Instead of going home, I go to the neighbors'. I ring, but nobody answers. The door is open, so I go inside. I'm looking around for the people, but nobody seems to be there. And then I hear the shower running, so I go upstairs to see what's what. Then I see her; this... girl, this incredible girl. I mean, what she's doing there? I don't know, because she doesn't live there... but it's a dream, so I go with it. "Who's there?" she says. "Joel," I say. "What are you doing here?" "I don't know what I'm doing here; what are *you* doing here?" "I'm taking a shower," she says. Then I give her: "You want me to go?" "No," she says; "I want you to wash my back." So now, I'm gettin' enthusiastic about this dream. So I go to her, but she's hard to find through all the steam and stuff; I keep losing her. Finally I get to the door... and I... find myself in a room full of kids taking their college boards. I'm over three hours late; I've got two minutes to take the whole test. I've... just made a terrible mistake. I'll never get to college. My life is ruined.

Miles: Joel, you wanna know something? Every now and then say, "What the fuck." "What the fuck" gives you freedom. Freedom brings opportunity. Opportunity makes your future... Say "what the fuck."... If you can't say it, you can't do it.

Joel Goodson: Uh, my name isn't really Ralph. It's Joel.
Lana: Mmmm. I'll be needing 300 bucks... *Joel*.
Joel Goodson: You're kidding.
Lana: No, I don't believe that I am.
Joel Goodson: Well, uh, it's just that I don't have that much here in the house.
Lana: How much do you have?
Joel Goodson: I have 50 dollars.
Lana: 50 dollars? What are we going to do about this, Joel?
Joel Goodson: I don't know.[pauses]
Joel Goodson: Could I send it to you?
Lana: [incredulous] Could you *send* it to me?
Joel Goodson: [long pause] I, uh, have a bond at the bank. I could go cash that.
Lana: I'm not real good at waiting.
Joel Goodson: I'll be quick.

(Magnífico ejemplo de negociación)

Guido: Let me give you a little advice so you know. In times of economic uncertainty, never ever fuck with another man's livelihood. Go have fun, now? You know fun, time of your life? Maybe if you follow that, I won't have to come back here.

Joel Goodson: My name is Joel Goodson. I deal in human fulfillment. I grossed over eight thousand dollars in one night. Time of your life, huh kid?

Y como corolario, unas "Risky Business Quotes", de http://quotations.about.com/cs/inspirationquotes/a/Business40.htm:
Bo Jackson: Set your goals high, and don't stop till you get there.

Les Brown: Shoot for the moon. Even if you miss, you will land amongst the stars.

Cesar Chavez: Si, Se Puede! (Yes, we are able!)

John D. Rockefeller: Singleness of purpose is one of the chief essentials for success in life, no matter what may be one's aim.

Demosthenes: Small opportunities are often the beginning of great enterprises.

African Proverb: Smooth seas do not make skillful sailors.

W. Clement Stone: So many fail because they don't get started; they don't go. They don't overcome inertia. They don't begin.

Herodotus: Some men give up their designs when they have almost reached the goal; while others, on the contrary, obtain a victory by exerting, at the last moment, more vigorous efforts than ever before.

Dowden: Sometimes a noble failure serves the world as faithfully as a distinguished success.

Charles Reader: Sow a thought, and you reap an act;/ Sow an act, and you reap a habit;/ Sow a habit, and you reap a character;/ Sow a character, and you reap a destiny.