jueves, agosto 21, 2014

BBC Mundo: 10 datos sobre la gasolina en Venezuela

Agosto, 2014


En Venezuela se habla de muchas cosas, pero sobre todo de una: la gasolina.

Ha sido así durante 100 años, desde que se empezaron a explotar hidrocarburos en el subsuelo venezolano hasta que el país sudamericano se convirtió en uno de los mayores productores del mundo.

Pero últimamente la gasolina está en cada conversación, después de que el presidente, Nicolás Maduro, propusiera hace una semana un debate nacional sobre el aumento del precio del combustible, que en Venezuela es particularmente barato y subsidiado por el Estado.

En un país donde la inflación siempre ha sido alta, el precio de la gasolina lleva desde 1996 sin subirse. El aumento anterior, en 1989, fue en parte el detonante de disturbios -conocidos como el Caracazo- que dejaron cientos de muertos. Y desde entonces hay un tabú con subir el precio de la gasolina.

Pero cuando los venezolanos discuten los pros y los contras de subir el precio de la gasolina, surgen unos datos que hacen de este tema digno de muchas conversaciones. BBC Mundo le cuenta algunos de ellos...

El presidente de PDVSA, Rafael Ramírez, dice que el gobierno les paga a los venezolanos por consumir gasolina.

1. Llenar el tanque cuesta menos que un caramelo

A un tanque promedio le caben unos 50 litros. Un litro de gasolina en Venezuela cuesta 0,07 bolívares (Bs.). Un carro promedio, entonces, queda lleno con 3,5Bs. ¿Qué cuesta 3,5Bs. en Venezuela? Un caramelo. Lo siguiente más barato en un quiosco de la calle es un paquete de cinco mentas: 12Bs.

Un dato adicional: en Venezuela hay tres tipos de cambio oficiales. Un dólar es 6,3Bs., [otro de] 10Bs. y [otro de] 50Bs. dependiendo de qué tasa se use. Así que, si se quiere saber cuánto vale llenar el tanque en dólares, puede ser US$0.5, US$0.35 o US$0.07 [de acuerdo a cada uno de esos tipos de cambio].

Asumiendo un consumo no muy eficiente de 15 litros por cada 100 kilómetros, con menos de 100 dólares (según la tasa más baja) uno podría darle la vuelta al mundo (recorrer los 40.000 kilómetros de su circunferencia) si tanquea en Venezuela.

2. Los gasolineros en las estaciones ganan más plata en propinas que Pdvsa por la gasolina misma

En Venezuela existe la práctica generalizada de pagar la gasolina con un billete de 5Bs. o 10Bs. y dejar las vueltas de propina al gasolinero. Según una fuente de alto nivel de la Asociación de Gasolineros de Aragua que pidió no revelar su nombre, un gasolinero gana alrededor de 800Bs. al día en propinas.


"Si tienes cuatro gasolineros por bomba, como suele ser, en total se ganan 3.200Bs. al día", le dice a BBC Mundo el también dueño de una estación. "Ahora, compara eso con lo que se paga por la gasolina: en promedio una bomba vende unos 25.000 litros de gasolina y recibe unos 2.800Bs.", dice. "Y esto es con números muy conservadores, porque me consta que en la mayoría de las estaciones de Venezuela es mucho más lo que ganan los bomberos que la estación", dijo.

De hecho, en los últimos años Petróleos de Venezuela (Pdvsa) ha empezado a ayudarles a los dueños de las estaciones a pagar por distribución, mantenimiento y nómina porque con el margen de ganancia que obtienen por la compra y venta de gasolina no les alcanza.

3. El subsidio genera pérdidas al Estado

Cada litro que produce le cuesta a Pdvsa 2,7Bs., según cifras de la propia petrolera. Y se venden a 0,07Bs.
Según el presidente de Pdvsa, Rafael Ramírez, Venezuela pierde US$12.500 millones al año por el subsidio. En 2013, fueron US$15.193 millones, dice Pdvsa. De hecho, el también Ministro de Economía [aunque no es economista de profesión, si no Ingeniero Petrolero] suele decir que "el Estado les paga a los venezolanos" para que consuman gasolina.

Por otro lado, añade la experta en energía de la consultora ODH Bárbara Lira, "cada litro que se vende en el mercado interno se está dejando de vender en el mercado internacional a precio internacional, que es más de 10.000% más alto de lo que se vende en Venezuela".

4. Una parte de la gasolina que se consume en Venezuela es importada

Pdvsa en ocasiones ha tenido que importar gasolina para mantener abastecido el mercado interno. "Especialmente", dice Lira, "cuando hay paradas de refinerías o accidentes, como fue el caso de la explosión de Amuay (en 2012)".
Los accidentes, entre otras cosas, han hecho que el país petrolero importe gasolina.

Por otro lado, varios de los componentes de la gasolina que se consumen en Venezuela son importados. "La gasolina es como una sopa, que necesita todo tipo de ingredientes y aunque la sopa que consumimos en Venezuela no es importada, muchos de sus ingredientes sí lo son", le dice a BBC Mundo Antero Alvarado, analista de la sucursal venezolana de la consultora Gas Energy Latin America. Y añade: "A veces también se importa combustible diesel para las plantas porque o se tiene comprometido en acuerdos bilaterales o porque se prevé que va a haber mantenimiento de una refinería que produce el diesel".

5. El negocio de su contrabando es más rentable que el narcotráfico en Colombia

Al ser la gasolina tan barata en Venezuela, su contrabando a Colombia se ha convertido en un negocio con una rentabilidad del 10.000%, según un reporte de la Dirección de Impuestos y Aduanas de Colombia.

Otras autoridades militares de Colombia -donde la gasolina es una de las más costosas de América Latina a US$1,1 el litro- han dicho que por esa rentabilidad al negocio del contrabando se han vinculado ramas de las guerrillas y los paramilitares colombianos.

Contrabando fronterizo de gasolina.

De hecho, de acuerdo al Centro de Estudios sobre Seguridad y Drogas de la Universidad de los Andes de Bogotá, el aumento de la efectividad en la incautación de drogas ha hecho que algunos carteles de la drogas pasen a ser carteles de la gasolina.

Según números de Pdvsa, 100.000 barriles de petróleo (un 5% de su producción total al día) pasan de Venezuela a Colombia a diario.

El contrabando genera pérdidas por US$1.400 millones, según [el Ministro de Economía y Presidente de Pdvsa, Rafael] Ramírez.

6. Hay escasez en ciertas partes de Venezuela

Precisamente por cuenta del contrabando los estados fronterizos de Venezuela han sufrido de escasez de gasolina.Una de las medidas de Pdvsa para combatir el contrabando, asegura Antero, "ha sido enviar menos volúmenes de combustible para que no se lo lleven".

Filas para echar gasolina en la frontera entre Colombia y Venezuela.

Las filas en las estaciones de gasolina fronterizas son kilométricas, ha constatado BBC Mundo. Y muchas veces la única forma de conseguir es con un contacto en la Guardia Nacional Bolivariana, que es quien dirige el acceso a las estaciones. "Al haber tanta corrupción, al final los que se perjudican son los residentes", señala Antero.

7. La producción de petróleo ha caído en los últimos años

La producción cayó 250.000 barriles de petróleo diarios desde 2004, según cifras de Pdvsa. Pasó de 3,148 millones de barriles por día (mbpd) a 2,898 mbpd, que es lo que actualmente produce. Pdvsa no ha cumplido en ningún año la meta de producción que se ha planteado. En febrero de 2013, por ejemplo, la producción estuvo en 600.000 barriles diarios por debajo de la meta que se propuso, que fueron 3,5 mbpd.

Del petróleo viene la mayor cantidad de divisas que entran a Venezuela.

En 2005, un plan del gobierno se propuso alcanzar 5,8 mbpd en 2012. Hoy se produce la mitad.

8. Venezuela tiene petróleo para los próximos 282 años

Venezuela tiene las reservas de petróleo más grandes del mundo, equivalentes a 20% de las reservas mundiales. 87% de sus reservas son de crudo extrapesado. Si sigue produciendo lo que produce ahora, Venezuela tiene petróleo para los próximos 282 años, según el informe de gestión de Pdvsa en el 2013. No obstante, el gobierno espera aumentar la producción en los próximos años con la ayuda de inversiones de China.

Analistas dicen que el tráfico de las ciudades de Venezuela es, en parte, producto del subsidio de la gasolina.

9. En los últimos 15 años Venezuela ha recibido por petróleo más que en 85 años anteriores

Cuando Hugo Chávez asumió el poder en 1999, el barril de petróleo estaba a US$8, pero desde 2006 ha estado por encima de US$70 y se ha estabilizado en los últimos años en alrededor de US$100. "El precio del petróleo nunca había estado tan alto", dice Antero.

En términos nominales, las exportaciones petroleras, desde 1999 hasta 2013, generaron US$784.404 millones. Desde 1958 hasta 1998, las exportaciones sumaron US$349.269 millones, que es menos de la mitad que en la era Chávez. El precio nominal del petróleo entre 1917 y 1958 promedió menos de US$2.

"Se trata de un número truculento, por la diferencia entre el precio real y nominal del petróleo", dice Lira. "Sin embargo, en términos nominales, y con estimaciones conservadoras, es más lo que recibió Venezuela en los últimos 15 años que lo que recibió antes".

Los enormes ingresos por el petróleo le permitieron a Chávez tener una amplia agenda de inversión social.

10. [El peor dato a largo plazo:] La gasolina que se consume en Venezuela es altamente tóxica

Entre un 5% y 10% de cada litro de la mezcla de gasolina que se consume en Venezuela es MTBE.

"Esto es un líquido que si bien aumenta el octanaje y hace más eficiente la gasolina, es altamente tóxico", según estudios que cita en conversación con BBC Mundo el profesor de ciencias ambientales de la Universidad de los Andes venezolana Julio César Centeno.

"Es un producto incoloro, insípido, que afecta el sistema nervioso de las personas, es cancerígeno y afecta el sistema endocrinológico", explica.

Venezuela eliminó el también tóxico plomo de su gasolina hace 10 años (fue uno de los últimos países del mundo), pero lo reemplazó con este aditivo que según Centeno también llega a la atmósfera y por ende a la comida y al agua que se consume.

La mezcla de gasolina que se consume en Venezuela tiene un componente altamente tóxico.

"Estados Unidos y Europa lo usaron cuando eliminaron el plomo en los años 70, pero cinco años después también lo erradicaron (y lo reemplazaron con etanol) después de que los estudios mostraron su toxicidad", dice Centeno, doctor de la Universidad de Berkeley, California.

Por otro lado, el diesel que se produce en Venezuela (que son poco menos de 300.000 barriles diarios) también es altamente tóxico por su gran contenido de azufre, explica Antero. Venezuela es uno de los países que más gasolina consume en América Latina y uno de los mayores emisores de la región de dióxido de carbono (Co2), un gas tóxico que contribuye al calentamiento global.

Fuente: BBC Mundo (consultar artículo aquí).

miércoles, agosto 13, 2014

Una Guía para el Debate sobre el Precio de la Gasolina



El reciente anuncio hecho por el Presidente Nicolás Maduro sobre (entre otros temas) el inicio de un debate sobre el precio de la gasolina no tomó desprevenido al blog Gestión Inteligente. De hecho, en varias ocasiones veníamos reflexionando al respecto: la primera, expresando cuales eran los 5 temas necesarios para discutir en el seno de la sociedad venezolana, donde no nos referimos exclusivamente al ámbito económico (por ejemplo, escribimos sobre los fines de la pena en una sociedad como la venezolana, que se dice democrática; la despenalización del aborto no terapéutico; nuestras prioridades educativas, pronunciándonos a favor de dedicar la parte más importante de los recursos del Estado a la educación básica -incluída la de carácter medio-, mientras que en la universitaria debería permitirse más activamente la apertura a los aportes y, en general, a la colaboración privada; y finalmente, la ineludible cuestión ambiental), aunque respecto a ese tópico, aludimos claramente al núcleo de lo que con el anuncio Presidencial se ha puesto en el tapete: la cuestión del subsidio de la gasolina y de los servicios públicos (electricidad, transporte, entre otros).

En una segunda oportunidad, reseñamos la experiencia de un país productor de petróleo que logró, con la asesoría del Fondo Monetario Internacional, desmontar el subsidio estatal sobre la gasolina, sin que se implementara una terapia de shock que impactara en sectores sociales vulnerables (como el lugar común indica que ocurrió en Venezuela durante el año 1989, uno de los detonantes de la jornada conocida como el Caracazo, de triste memoria para los venezolanos). La referida experiencia, seguimos pensando, puede ser un modelo valioso a seguir para inspirar las medidas que podrían ser implementadas al respecto por Venezuela.

En tercer lugar, cuando ya asomaba con fuerza la intención del Gobierno nacional por debatir el tema, mientras reseñábamos las noticias del momento, enumeramos algunos argumentos a favor de la medida, tales como: la racionalidad económica, el equilibrio presupuestario, la erradicación de (parte de) las distorsiones económicas existentes en el país, mismos que ahora se están discutiendo con fuerza en los interesados en el tema. La situación actual es más difícil que la oportunidad en la se empezó a tratar con menos timidez el tema del precio de la gasolina: la crisis económica, cocinada durante largos años de políticas audaces, pero equivocadas, que ahora es cuando han venido revelando su fracaso, ha estado afectando a toda la población venezolana: trabajadores y empresarios por igual. De allí lo importante de traer a colación el tema y de ventilarlo públicamente, no sólo entre las personas allegadas al oficialismo y los funcionarios encargados de las decisiones de política económica, sino por parte de toda la población.

Ángel Alayón, columnista de Prodavinci.com, una página dedicada a la actualidad venezolana, propone una guía para discutir el asunto. Al introducir el debate abiertamente planteado por Nicolás Maduro, sintetizó la situación de la siguiente manera:
El precio subsidiado de la gasolina genera cuantiosas pérdidas a PDVSA y al fisco nacional: los cálculos oficiales las estiman en 12.500 millones de dólares al año, producto de un subsidio que beneficia principalmente a los venezolanos que se movilizan en vehículos particulares, que son minoría y además tienen un ingreso superior al promedio. En consecuencia, el subsidio de la gasolina es regresivo. Es decir: beneficia a los que más tienen en perjuicio del resto de la sociedad. Por esta razón, en principio, el aumento del precio de la gasolina combatiría la desigualdad. Y ése es un argumento que escucharemos muchas veces en las próximas semanas.

Sin embargo, el beneficio de los que “menos tienen” depende del uso que se le dé a los recursos que genere el aumento del precio de la gasolina. Los dueños de vehículos pagarán más por cada litro de combustible, mientras que a PDVSA y al fisco le entrarán más recursos. ¿Se utilizará ese dinero producto del aumento del precio de la gasolina para beneficiar a quienes hay que beneficiar? En este torno a las respuestas a esta pregunta se centrará buena parte del debate. Muchos dirán que sí aceptan el aumento del precio de la gasolina, pero que debe discutirse sobre el uso de los fondos.

Nicolás Maduro, anticipándose a esta discusión, propuso una fórmula de distribución:

 “Propongo que todo el dinero que venga vaya a un Fondo Social centrado en el país y en sus necesidades”, señaló. La distribución será la siguiente: 20% para la Gran Misión Vivienda Venezuela, 20% para becas del sistema universitario, otro 20% para la Misión el  Amor Mayor, otro para Patria Segura  y un último 20% para vialidad y servicios”.

Se trata de un viejo recurso para darle viabilidad política a lo incómodo: marcar el destino de los fondos que se recaudan con nuevos impuestos o, en este caso, con el incremento del precio de un producto subsidiado a programas inapelables. Sin embargo, la propuesta de Maduro está lejos de agotar la discusión.
 Otros temas abordados por Alayón, incluyen:

* La disposición de información detallada sobre el destino de los recursos obtenidos al disminuirse (o eliminarse de plano) el subsidio a la gasolina. La transparencia volvería al debate más fluido y generaría mayor conciencia acerca de las necesidades y beneficios de la medida.

* La mayor efectividad de plantear inversiones concretas con los ingresos del aumento del precio del combustible, en lugar de asignar porcentajes a planes abstractos, sin que se desglose cómo serán utilizados, tal y como parece ser la propuesta del Presidente.

* La posibilidad de tomar en cuenta la propuesta de varias personas en torno a la entrega directa a los ciudadanos de (al menos parte de) lo recaudado por concepto del incremento.

* El impacto del debate en la forma en que se ha venido gestionando la empresa petrolera estatal, Petróleos de Venezuela (PDVSA) en los últimos 15 años.

* La evaluación de los posibles cambios en la conducta de los consumidores (en el sentido de una racionalización del uso del combustible).

* Finalmente, pero no menos importante, la cuestión de la incidencia de la medida en el desestímulo del contrabando de extracción de combustible venezolano hacia Colombia y Brasil, activado por el diferencial de precios entre nuestro mercado y el de los países vecinos.

La cuestión apenas inicia. Aún es imposible prever hasta donde nos llevará el curso de los eventos. Lo que sí parece seguro es que la decisión de aumentar el precio de la gasolina ya parece tomada, y que la supuesta consulta es tan sólo un mero trámite necesario para que aquella tenga cierta legitimidad para que se efectúe sin sobresaltos, sobre todo tomando en cuenta el hervidero social actualmente existente debido a la inestabilidad económica, la pésima gestión del gabinete en el ámbito y la tensión política que llegó a su culminación con los acontecimientos que estallaron en febrero de este año. Tal y como Alayón concluye su artículo, no nos queda más que expresar nuestro deseo de que la cuestión del precio de la gasolina (y de las demás que se avecinan en el ámbito económico) tenga un desenlace conveniente: "Ojalá pueda plantearse la discusión… o los fantasmas seguirán acechando". A conjurar, pues, esos fantasmas, debatiendo el asunto para tomar la decisión más favorable a los intereses de todos.