viernes, noviembre 29, 2024

Perfiles inteligentes: la sabiduría controversial de Henry Kissinger

Hoy se cumple un año del fallecimiento de Henry Kissinger (27 de mayo de 1923, Fürth, Alemania - 20 de noviembre de 2023, Kent, Connecticut, Estados Unidos) destacado político y diplomático estadounidense y personaje controversial donde los haya. Su familia, de origen judío, emigró a Estados Unidos en 1938 para escapar de la persecución nazi. Kissinger obtuvo la ciudadanía estadounidense en 1943 y sirvió en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial.

Kissinger estudió Ciencias Políticas en la Universidad de Harvard, donde también enseñó antes de entrar en la política activa con el Partido Republicano. En 1968, el presidente Richard Nixon lo nombró asesor de seguridad nacional, y en 1973, secretario de Estado. Durante su mandato, Kissinger fue una figura clave en la política exterior de Estados Unidos, promoviendo la distensión con la Unión Soviética y el acercamiento a China.

Kissinger jugó un papel crucial en las negociaciones para poner fin a la Guerra de Vietnam y en los esfuerzos de paz en Oriente Medio, lo que le valió el Premio Nobel de la Paz en 1973. 

Por lo tanto, a él se le atribuyen tres acontecimientos de la política exterior estadounidense: la firma de los acuerdos de paz con Vietnam del Norte (1973), el soporte estratégico para el golpe contra Salvador Allende en Chile (1973) y la apertura de relaciones diplomáticas con la China comunista (1979).

Tras su retiro de la política activa, continuó influyendo en la política internacional como asesor y autor de varios libros sobre relaciones internacionales.

Kissinger y la Guerra de Ucrania

Nuestro personaje demostró un gran conocimiento y experticia en materia de relaciones internacionales hasta el último momento. Autor de libros como Un Mundo Restaurado, su magistral tesis doctoral sobre transformación del paisaje europeo por el conde Klemens von Metternich, así como el monumental Diplomacia; en 2022 publicó un breve artículo donde detallaba los antecedentes, orígenes, presente y futuro de lo que se prefiguraba en ese entonces como la guerra entre Rusia y Ucrania.

Para conseguir la paz, un primer paso importante es comprender qué hay realmente en el corazón y la mente del adversario, entender cómo piensa y cómo ve el mundo. Normalmente refleja alguna aspiración y entonces uno debe decidir si las aspiraciones del adversario son absolutamente incompatibles con los principios de uno mismo.

Alguien ha dicho que las diferencias entre los hermanos pequeños las ventilan y resuelven los padres; entre la gente común, las autoridades; entre las naciones, la paciencia, la tolerancia, la agudeza y la inteligencia de sus diplomáticos. Cuando las diferencias llegan a un punto donde parecen insolubles, solo las puede solucionar la sabiduría.

Con demasiada frecuencia la cuestión de Ucrania se plantea como un enfrentamiento: si Ucrania se une al este (el occidente atlántico y euroamericano) o al oeste (el mundo euroasiático). Pero Kissinger reconocía que, para que Ucrania sobreviva y prospere, no debe ser un punto de avanzada de ninguno de los lados contra el otro: debe funcionar como un puente.

Se puede afirmar de los conflictos bélicos (y de las dictaduras) que se sabe cuándo comienzan, pero no cuándo terminan. Los expertos más connotados prevén costos humanos y financieros que siempre son desbordados en proporciones incuantificables por la sangre y el horror.

Advertía Kissinger, con la frialdad y el conocimiento que le han dado el estudio de las relaciones internacionales y una vasta experiencia, que Rusia debe aceptar que forzar a Ucrania a convertirse en un satélite, y empujar, por lo tanto, una nueva modificación de las fronteras de Rusia, condenaría a Moscú a repetir su historia de ciclos de presiones recíprocas con Europa y Estados Unidos.

Por otra parte, urgía a Occidente comprender que, para Rusia, Ucrania no puede ser simplemente un país extranjero. La historia rusa comenzó en Ucrania. La historia rusa comenzó en lo que se llama la Rus de Kiev. La religión rusa se extendió desde allí. Ucrania ha sido parte de Rusia durante siglos… La flota del Mar Negro, el medio de Rusia para proyectar su poder en el Mediterráneo, tiene su base en arrendamiento a largo plazo en Sebastopol, en Crimea. Incluso disidentes tan famosos como Alexander Solzhenitsin y Joseph Brodsky insistieron en que Ucrania era una parte integral de la historia rusa.

El mismo Kissinger, al definir la política exterior como el arte de establecer prioridades, con severidad juzga críticamente a la Unión Europea: Su morosidad burocrática y la subordinación de la estrategia a la política interna en las relaciones de Ucrania con Europa contribuyeron a convertir una negociación en una crisis.

A casi 3 años de operaciones militares, han sido devastadores los resultados sobre la vida de los ucranianos, tanto civiles y militares, la infraestructura vial, puertos, aeropuertos, industria y comercio. Los efectos sobre la economía del resto del mundo no se han hecho esperar. Los costos de energía, la estabilidad de los mercados financieros y las exportaciones agrícolas empiezan a mostrar las consecuencias del conflicto.

Los más importantes argumentos para explicar el corazón del problema, según Kissinger, eran los esfuerzos radicales, constantes y sistemáticos de Víctor Yanukóvich y su principal rival político, Yulia Timoshenko, por imponer su voluntad. Eran las dos facciones rivales de Ucrania, ninguna de las cuales estaba dispuesta a compartir el poder.

Según Kissinger, una política sabia de Estados Unidos hacia Ucrania debía buscar la manera de que esas dos partes del país cooperaran entre sí. Recomendó buscar la reconciliación, no el predominio de una facción sobre la otra. En el caso de Rusia, continuó, Putin debe darse cuenta de que, cualesquiera fuesen sus quejas, una política de imposición militar producirá otra Guerra Fría. Por su parte, Estados Unidos necesita evitar tratar a Rusia como un rival aberrante y maligno para pasar a enseñar diplomática y políticamente las reglas de conducta establecidas por Washington.

Las recomendaciones del veterano diplomático para evitar una escalada militar incluían lo siguiente:

- Ucrania no debía unirse a la OTAN.

- Ucrania debía tener derecho a elegir libremente sus asociaciones económicas y políticas, incluso con Europa (lo que en última instancia no deja de ser una recomendación antitética con la anterior).

- Ucrania debe ser libre e independiente para crear cualquier gobierno compatible con la voluntad expresa de su pueblo.

- Ucrania internacionalmente debería perseguir lograr conseguir una posición realmente independiente, como Finlandia (desde abril de 2023, Finlandia es miembro de la OTAN).

- Ucrania, para lograr ese objetivo, requiere reclamar la soberanía sobre Crimea.

Detengámonos un poco más este punto. Para Kissinger, es inaceptable, con las reglas del actual orden mundial, que Rusia se anexe Crimea. Pero podría ser posible poner las relaciones de Crimea con Ucrania sobre unas bases menos tensas. Con ese fin, Rusia reconocería la soberanía de Ucrania sobre Crimea. Ucrania reforzaría la autonomía de Crimea mediante elecciones libres con observación internacional. Este proceso tendría que eliminar cualquier ambigüedad o duda acerca del status de la flota del Mar Negro en Sebastopol.

Lo cierto es que Rusia no sólo se anexionó Crimea en violación del Derecho internacional, sino que la aseguró con la ocupación posterior de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia.  

Para Kissinger, estos eran principios, no prescripciones.

Sin embargo, la guerra aun está lejos de terminar, el avance ruso sobre el territorio ucraniano ha sido constante (aunque pírrico, dadas las gigantescas pérdidas en equipo militar y vidas humanas) y el ejército ucraniano ha logrado mover el teatro de operaciones hacia territorio ruso. Bajo esas perspectivas, una pausa en el conflicto, y mucho menos su solución, parece improbable.

Más allá de la clarividencia y las advertencias de Kissinger, la posibilidad de que el conflicto continúe escalando hacia un evento de proporciones globales aún sigue latente.

El "Decálogo del Buen Gobierno"

El economista argentino Juan Carlos de Pablos, en un artículo de lectura deliciosa, formula el siguiente Decálogo del buen gobierno según Henry Kissinger, sobre la base de la lectura de sus Memorias:

1) Los académicos pueden quedarse en el plano de las conclusiones; los gobernantes no tienen más remedio que llegar hasta las políticas… y la diferencia no es poca; 

2) En el gobierno se aprende cómo tomar decisiones, pero no qué decisiones hay que tomar

3) Como las decisiones las toman los hombres, el elemento psicológico es insoslayable

4) La decisión es normalmente negociación. Negocia bien quien se prepara bien; quien negocia cuando todo parece ir bien; quien no se decide en la primera ronda de negociaciones; y quien –habiendo decidido qué quiere– salta rápidamente a la posición deseada y desde ahí hace pocas concesiones

5) En épocas de crisis, lo único seguro es ser audaz y no aflojar hasta que la crisis haya pasado

6) Solo en retrospectiva los hechos parecen inevitables; solo en retrospectiva se advierten los hitos; la oportunidad nunca se convierte automáticamente en realidad; 

7) La burocracia no sabe generar alternativas genuinas. Siempre rodea su opción preferida con un par de alternativas absurdas; 

8) La prensa es hoy un árbitro para los acontecimientos internacionales que es imposible ignorar

9) Uno se “debe” al presidente, porque lo nombró. Hay que decirle la verdad, hay que socorrerlo espiritualmente, no hay que irle con cuestiones de poca importancia. No se debe esperar que el gabinete nacional sea una institución de pensamiento independiente; 

10) Las transiciones iniciales de todos los gobiernos son breves, llenas de ingenuidad, y rara vez preparan para lo que viene; las transiciones finales son tristes, y no siempre uno tiene el valor de no criticar al que le sigue en el cargo.

Al hacer unas reflexiones sobre el liderazgo inspiradas por el diplomático germano-americano, el argentino concluye con una reflexión que nos parece fascinante, muy a propósito para los tiempo turbulentos e inciertos de ahora:

En la realidad “las balas son de verdad, no de fogueo” [en Chile hay un refrán popular que calza como anillo al dedo: "otra cosa es con guitarra"]; no estamos en el mundo de las monografías, sino en el de la decisión entre presidentes de distintas naciones. Entidades soberanas, que encima manejan armas. Quienes hoy viven angustiados, materia prima no les falta.

Rest in peace, Mr. Kissinger.


Fuentes:

martes, noviembre 26, 2024

Más sobre Anne Scheiber

En una entrada anterior presenté la historia de Anne Scheiber y su logro extraordinario de alcanzar, luego de jubilarse y tras largos años de inversión paciente, la cifra extraordinaria de 22 millones de dólares, aun cuando padeció la discriminación usual para entonces, al ser una mujer judía en la Nueva York de mediados del siglo XX.

En esta ocasión, ahondaré un poco más sobre los métodos de Scheiber durante su itinerario en el campo de las inversiones en Bolsa de valores, que transitó pacientemente a lo largo de muchos años, haciendo gala de una frugalidad a toda  prueba, informándose y asesorándose debidamente. Aunque sus logros puedan parecernos extraordinarios a los ojos de hoy, queda fuera de toda duda que se puede aprender de su experiencia y tratar de aplicar sus lecciones en nuestra propia vida.

1. La Paciencia

En primer lugar, hablemos sobre la paciencia. Cuando leemos sobre la vida de Anne, podemos aprender que un elemento primordial para el éxito en la inversión es actuar en el largo plazo, comprando acciones de compañías líderes que aumentan constantemente sus ganancias. Esto permite con el tiempo construir una sólida cartera diversificada que puede ayudar a suavizar las caídas, recesiones y los golpes de las empresas que fracasan.

2. La Frugalidad

En segundo lugar, respecto a su proverbial frugalidad, dado que Anne no obtuvo promociones y aumentos, terminó recortando sus gastos hasta la médula. De esta manera, entendió las matemáticas simples que hay detrás de la jubilación anticipada. Cuando leemos comentarios sobre Anne, todos se centran en su extraordinaria frugalidad y capacidad de ahorro. Vivió en su apartamento de alquiler durante 51 años después de su jubilación, usaba ropa vieja y ahorraba en los gastos de comida. Su entretenimiento consistía en ir al cine, leer informes de bolsa, analizar compañías y leer. Nunca se casó ni tuvo hijos.

Muchos de los comentarios negativos hacia Anne provienen generalmente de personas que no entienden el poder de la capitalización y el enriquecimiento a una edad avanzada. Como se ha mencionado, Anne era muy frugal, y se las arregló para ahorrar el 80% de su salario para terminar con su cartera de inversión. Tuvo que velar por sí misma toda su vida, así que esa pequeña cartera era su forma de recuperar su independencia de un mundo que la discriminaba. Era para permitirle vivir su vida en sus propios términos, lo cual es admirable.

3. La Curiosidad

En tercer lugar, Anne se mantenía informada sobre sus inversiones y mantenía contacto con sus asesores de inversiones. Muchos inversores exitosos tienden a vivir hasta una edad avanzada. Tal vez se deba a que invertir en acciones es una actividad muy estimulante, porque requiere una investigación constante, aprender nuevos hechos e ideas y descartar los viejos hechos e ideas que no funcionan o que están totalmente equivocados. También ofrece la oportunidad de descubrir la próxima gran empresa. La diversificación y la inversión a largo plazo funcionan de maravilla para aquellos que son lo suficientemente pacientes para capitalizar ("componer") su dinero durante décadas. 

Una de las cosas más interesantes del camino de inversión transitado por Ana, es la idea de la inversión como el único campo en el que, si eres bueno, tu raza, género o nacionalidad no importan, ya que es una verdadera meritocracia. Y si mantienes tu dinero invertido el tiempo suficiente, podrás terminar con mucho dinero al final de tu vida.

4. El Efecto Compuesto

Según las estimaciones, es probable Anne que haya beneficiado del efecto compuesto sobre su dinero a una tasa de 14% - 15% al año, aproximadamente, durante un extenso período de tiempo. Cuando se compone el dinero en el largo plazo a una alta tasa de retorno como esa, la cantidad con la que se inicia termina siendo realmente pequeña en comparación con la cantidad final.

Si hacemos un cálculo simple en el que proyectamos la capitalización de unos $20.000 iniciales a una tasa de retorno compuesto del 15% durante 50 años, para trazar los paralelismos con la trayectoria de Anne Scheiber, partiendo de 1944, con una ganancia de $600 por dividendos anuales (esto es, a una rentabilidad de 3% al año), en períodos de 10 años, el resultado sería el siguiente:

- En 1954, su cartera habría crecido a $80.900, ganando $2.427 en dividendos al año.

- En 1964, el portafolio tendría un valor de $327.330, ganando $9.820 en dividendos anuales.

- En 1974, su cartera crecería $1.324.000 y habría generado un ingreso de $39.700 al año.

- En 1984, su cartera tendría un valor de $5.357.000, generando $160.700 dólares en dividendos.

- Finalmente, en 1994/1995, su cartera tendría un valor de $22.000.000, generando $750.000 en dividendos.

Por lo tanto, si asumimos que Scheiber partió su camino de inversión con $20.000 dólares en 1944, ese dinero podría haberle generado más de $500 dólares en dividendos anuales. Si ella realmente ahorraba el 80% de su salario de $3.150 hacia 1944, ese ingreso de dividendos habría sido suficiente para vivir. Pero eso también significaba que tenía que ser extremadamente frugal para sobrevivir. No estamos seguros de si tenía una pensión o un cheque de la Seguridad Social, pero es probable que esta fuera una pequeña cantidad, a la cual no podría haber accedido hasta los 62 años.

Si Anne realmente capitalizaba su dinero a un 15% anual, eso significa que sus ahorros se duplicaban cada 5 años. Está claro que los retornos compuestos del mercado de valores no son lineales, a veces los retornos al principio del viaje son más altos que los retornos al final. Asumamos que los ahorros de Anne ni siquiera comenzaron a producir suficientes dividendos que reemplazaran su salario hasta una década después de su retiro. Para entonces, sus hábitos frugales ya estarían establecidos y contaba con 60 años. 

Es un hecho puramente matemático que, si empiezas con una cantidad decente de dinero, lo combinas con una tasa de retorno decente y lo combinas durante un largo período de tiempo, terminarás con mucho dinero. Probablemente más dinero que el estrictamente necesario para satisfacer las necesidades. Pero si tiene 22 millones de dólares en el momento de su muerte a los 101, significa que pasó mucho tiempo ahorrando, invirtiendo y capitalizando gran parte de sus ingresos desde que se jubiló a los 51. 

Mucha gente no entiende el papel de la capitalización durante largos períodos de tiempo, y su influencia determinante en hacerse realmente rico, aunque lean sobre Warren Buffett, y lo admiren. Sin embargo, lo más probable es que Anne Scheiber haya tenido una personalidad similar a la de Buffett: a ambos les gustaba ahorrar e invertir su dinero, y lo hicieron durante largos períodos de tiempo.

Para poner las cosas en perspectiva, a los 52 años, Warren Buffett tenía una fortuna de unos $400 millones, lo que es muchísimo dinero. A la edad de 90 años su patrimonio aumentó a $78 mil millones. Durante casi 40 años, continuó acumulando dinero a una tasa de retorno muy alta.

La idea de Anne de que la forma más fácil de hacerse rico en América es a través de la propiedad de acciones está ampliamente apoyada por el análisis y los datos disponibles hoy día. En el gráfico, el rendimiento de las acciones considerado durante 200 años (1802-2002) en comparación con los bonos, las letras del tesoro, el oro y el índice de precios al consumidor (CPI).

Esto nos permite considerar lo siguiente: mientras que una carrera laboral normal usualmente dura unos 30 - 40 años, un retiro usual también podría ronda otros 30 - 40 años. Una pareja de jubilados debería acumular ahorros para proveer las necesidades de ambos durante ese tiempo. Sin embargo, si lo pensamos bien, muchos padres quieren proporcionar una base sólida para sus hijos e incluso sus nietos. Como resultado, un jubilado típico debería planificar su patrimonio durante más de 30 o 40 años: puede que tenga que pensar en una estrategia a prueba de balas que le permita capitalizar su dinero durante 50 años o más.

En suma, las principales lecciones que podemos aprender de la historia de Anne Scheiber son las siguientes:

1.  Actuar con paciencia y visión de largo plazo (más que años, décadas), invirtiendo regularmente en compañías que podemos entender.

2. Practicar la frugalidad para acumular un capital inicial de inversión y mantener aportes constantes.

3. Mantenerse informados sobre el mercado de valores y atender el consejo de buenos asesores.

4. Reinvertir los dividendos para beneficiarse del efecto compuesto.

Advertencia: las consideraciones expresadas en este blog no son recomendaciones de inversión, sino simplemente un marco para el aprendizaje y la reflexión. Si le interesa ahondar más en el tema, debe profundizar su análisis leyendo reportes e informes y asesorándose debidamente con ayuda profesional.

Es todo por el momento. Espero que el contenido sea de provecho e interés. Hasta la próxima.

Créditos: Cómo Anne Scheiber ganó 22 millones de dólares invirtiendo en acciones con crecimiento de dividendos (The Finanzial).

lunes, noviembre 25, 2024

La historia de Ronald Read: de vivir como bedel a morir siendo millonario

La semana pasada publiqué una entrada sobre una mujer extraordinaria, Anne Scheiber, quien a pesar de sus orígenes humildes y de haber sufrido discriminación por ser mujer y judía, llegó a acumular una fortuna de 22 millones de dólares desde la mitad de sus 101 años de vida. Ahora voy a hablar de un caballero que logró una hazaña semejante desarrollando unos hábitos muy parecidos.

La foto del anuario del personaje de hoy: un joven Ronald James Read, a cuyo pie decía lo siguiente: It is tranquil people who accomplish much ("Es la gente callada la que logra mucho").

Ronald James Read nació el 23 de octubre de 1921 en Dummerston, Vermont, Estados Unidos, en una familia empobrecida dedicada a la agricultura. Debido a su origen humilde, para asistir a la escuela secundaria debía caminar 6 km hasta Brattleboro, la ciudad más cercana a su pueblo. 

Fue el primer graduado de secundaria en su familia. Durante la Segunda Guerra Mundial, ingresó al  Ejército de los Estados Unidos y vio acción en el norte de África, Italia y el Pacífico. Al regresar a Brattleboro después de su baja honorable en 1945, trabajó en una estación de servicio durante casi 25 años. Aparentemente no disfrutó mucho de la jubilación y prefirió “retirarse de su jubilación” para continuar trabajando como bedel (conserje) a tiempo parcial en una tienda J. C. Penney durante 17 años, antes de retirarse en 1997.

A pesar de su modesto estilo de vida, Read acumuló una fortuna de casi 8 millones de dólares, invirtiendo en acciones que generaban dividendos y evitando invertir en empresas que no entendía. Su estrategia implicaba comprar y mantener acciones en un portafolio diversificado, con una fuerte concentración en empresas sólidas.

Después de su muerte en junio de 2014, Ronald dejó una herencia de $1,2 millones a la Biblioteca Memorial Brooks y $4,8 millones al Hospital Memorial Brattleboro. 

¿Cómo se las arregló Ronald Read para lograr una fortuna de 8 millones de dólares? Además de ser bueno seleccionando acciones, demostró una notable frugalidad y paciencia, lo que le proporcionó muchos años de crecimiento compuesto.

Read vivía modestamente, trabajando como personal de mantenimiento y conserje en una tienda después de un largo período en una estación de servicio que en parte era propiedad de su hermano.

Sentado, de gorra, un anciano Ronald Read espera el café al tomar desayuno.

Quienes lo conocieron hablan de cómo a veces usaba prendedores para sujetar su abrigo y estacionaba su Toyota Yaris 2007 lejos de donde iba para evitar alimentar el parquímetro. Según Bridget Bokum, asociada senior de clientes en el banco Wells Fargo de Brattleboro, quien lo ayudaba con su patrimonio: “Si podía ahorrar un centavo, lo hacía”.

Read poseía al menos 95 acciones al momento de su muerte, muchas de las cuales había mantenido durante años, si es que no décadas. Estaban repartidas en una variedad de sectores, incluidos ferrocarriles, empresas de servicios públicos, bancos, atención médica, telecomunicaciones y productos de consumo. Evitó las acciones tecnológicas.

Sus amigos decían que Read normalmente compraba acciones de empresas que conocía y que pagaban buenos dividendos. Cuando llegaban los cheques de dividendos por correo, él invertía el dinero en más acciones.

Entre sus participaciones más antiguas se encontraban gigantes de primera línea como Procter & Gamble, J.P. Morgan Chase, General Electric y Dow Chemical. Cuando murió, también tenía participaciones en J.M. Smucker, CVS Health y Johnson & Johnson.

Sin embargo, el viejo Read no siempre conectó jonrones. Su cartera incluía acciones de Lehman Brothers Holdings, la firma financiera que colapsó en 2008, por ejemplo. Pero estuvo dispuesto a seguir con su selección de acciones por muchos años.

Por ejemplo, el 13 de enero de 1959, compró 39 acciones de Pacific Gas & Electric (PG&E), cuando tenían un valor de unos $2.380. Al momento de su muerte, valían alrededor de $10.735, tomando en cuenta las desdoblamiento de acciones (stock splits) posteriores de 2 x 1 y 3 x 1 que aumentaron esas acciones a 234. 

En total, Read llegó a poseer 578 acciones de PG&E, por un valor de poco más de $26.500, algunas de las cuales pudo haber comprado con los pagos de dividendos que la empresa hizo a los accionistas.

Según algunas fuentes, estas eran las principales posiciones de Ronald Read al final de su vida. Destacan empresas financieras (Wells Fargo, American Express), consumo defensivo (Procter & Gamble, Colgate-Palmolive, McCormick), farmacéuticas/cuidados de la salud (Johnson & Johnson), entre otras. 

Para investigar nuevas inversiones, Read en parte se apoyaba en publicaciones impresas, por ejemplo, se dice que estaba suscrito a publicaciones como The Wall Street Journal y Barron's, aunque también utilizaba la biblioteca local. Su abogada dijo que todos los días leía el Wall Street Journal y que "era bueno en dos cosas: invertir y cortar madera".

Nuestro personaje también conversaba sobre inversiones con sus conocidos, incluido un vecino que era su asesor del banco Wells Fargo en Brattleboro, de quien regularmente buscaba su consejo, manteniendo una cuenta de corretaje en la firma, aunque ésta sólo poseía una pequeña porción de sus inversiones.

Para el inversor actual, utilizar la misma forma de invertir de Read podría resultar algo engorroso, ya que él compraba y guardaba las acciones en papel, mientras que actualmente se trata de certificados electrónicos. La mayoría de los inversores de hoy en día favorecen a las plataformas en línea, más fáciles de usar y con comisiones más competitivas, así como el fácil acceso a la investigación en Internet.

[Una de estas plataformas es hapi, una de los brokers más sencillos de usar, con comisiones bastante competitivas y que es posible usar desde muchos países de América Latina.]


¿Qué lecciones podemos aprender de la vida y experiencias de Ronald Read?

La historia de Ronald Read es un recordatorio poderoso de que la riqueza no siempre se refleja en un estilo de vida aparente. ¿Cómo un hombre de medios tan modestos pudo llegar a acumular tanta riqueza? Su historia es verdaderamente inspiradora, ya que contiene lecciones ejemplares sobre el ahorro y las inversiones que pueden aplicarse a todos nosotros. 

A continuación, algunas lecciones valiosas que podemos aprender de su vida y su enfoque financiero:

1. Frugalidad y vivir por debajo de nuestras posibilidades:

Ronald Read vivía de manera extremadamente frugal. De hecho, probablemente podría haberle dado a Warren Buffett –quien también es famoso por su frugalidad– una competencia por su dinero: reutilizaba la ropa hasta que estaba gastada y buscaba formas de ahorrar en gastos diarios, como estacionamiento gratuito. La frugalidad es clave para acumular riqueza: gastar menos de lo que ganamos y vivir dentro de nuestras posibilidades nos permite ahorrar e invertir.

Los amigos de Read lo recuerdan conduciendo un automóvil usado y usando imperdibles para sujetar su abrigo gastado. Incluso continuó cortando su propia leña mucho después de cumplir 90 años. Mark Richard, amigo y vecino de Read, dijo de él lo siguiente: "Estoy seguro de que si ganó 50 dólares en una semana, probablemente invirtió 40 dólares".

Es un enfoque bastante sencillo: gastar menos de lo que gana le deja más para invertir y generar riqueza con el tiempo a través de inversiones.

2. Inversiones a Largo Plazo:

Read fue un inversor paciente. Mantuvo sus inversiones durante décadas sin vender, permitiendo que el efecto compuesto hiciera su magia. El tiempo estaba de su lado: muchas de las acciones que poseía las había conservado durante décadas. Hacerlo requirió de una gran paciencia, que le permitió que el poder de la capitalización ("interés compuesto") funcionara a su favor. Sus ganancias se sumaron a las ganancias anteriores, durante décadas. 

También le ayudó vivir hasta los 92 años: el poder de la capitalización se magnifica en un horizonte temporal largo. En otras palabras, es más probable que invertir durante mucho tiempo genere los mayores rendimientos. La tasa de crecimiento anual compuesto de Buffett (9,17%) habría convertido $1.000 en $9.000 en 25 años, que en 30 años habrían llegado a ser $13.900.

La mayoría de los inversores no aprovechan el tiempo. Empiezan a ahorrar en serio demasiado tarde, no son nada pacientes y no dejan que los años jueguen a su favor. Ronald Read no fue un operador activo: al contrario, tenía una paciencia extraordinaria.

Para ser sinceros, ninguno de nosotros puede controlar cuánto tiempo vivimos. En cambio, comenzar temprano y permanecer en el mercado el mayor tiempo posible sea probablemente la mejor estrategia. También es recomendable dejar que las acciones ganadoras corran durante más tiempo. Obtener ganancias demasiado pronto o negociar sus posiciones con demasiada frecuencia agrega costos y disminuye el poder de la capitalización.

La consistencia y la paciencia son fundamentales en la inversión. No se trata de ganar rápidamente, sino de mantener una estrategia sólida a lo largo del tiempo.

3. Conocimiento de las Inversiones:

Read invirtió en acciones de empresas que conocía y comprendía, centrándose en compañías que repartían dividendos. Conocer bien las inversiones en las que participamos nos ayuda a tomar decisiones informadas y a evitar riesgos innecesarios. Como Warren Buffett, Ronald Read evitó las acciones tecnológicas y las acciones de moda del momento, simplemente porque no las entendía.

No poseía una cartera concentrada; en cambio, tenía una cartera diversificada con muchas empresas en muchos sectores. Entre las 95 acciones que poseía, había muchas blue chips (empresas de primera línea): Procter & Gamble, JPMorgan Chase, General Electric, Johnson & Johnson, Dow Chemical, J.M. Smucker y CVS Health. Esta diversificación le permitió distribuir ampliamente el riesgo: ser propietario de empresas quebradas como Lehman Brothers tuvo sólo un impacto modesto en sus ganancias.

Además, Read normalmente invertía en acciones de empresas que pagaban dividendos periódicamente. Esos cheques de dividendos que recibía los reinvertía en más acciones de las mismas empresas. Si estas acciones obtenían buenos resultados, es de suponer que reinvertir los dividendos funcionaría aún mejor. No era un trader activo, aunque sí era un comprador activo. Hay una diferencia muy grande.

4. Legado Filantrópico:

A pesar de su modesta vida, Read dejó una herencia de casi 8 millones de dólares. Su legado filantrópico incluyó donaciones a la Biblioteca Brooks Memorial ($1,2 millones de dólares) y el Hospital Brattleboro Memorial ($4,8 millones de dólares).

Esto nos recuerda que la riqueza no siempre se refleja en el estilo de vida aparente. Podemos hacer una diferencia significativa incluso con recursos limitados. Además, la caridad evita al recaudador de impuestos: la exención del impuesto sobre el patrimonio en 2014 fue de $5,34 millones y, para una pareja casada, $10,68 millones. Como Read era viudo, su patrimonio de $8 millones no estaba sujeto al impuesto federal sobre el patrimonio.

En Vermont (el estado donde vivía Read) existe un impuesto al patrimonio que oscila entre el 0,8% y el 16%, pero no existe ningún impuesto sobre donaciones, y eso significa que el legado de Read a la biblioteca y al hospital locales pasó a sus beneficiarios previstos sin ser tocado por el IRS.

En síntesis, la historia de Ronald Read nos enseña que la riqueza no está reservada solo para aquellas personas con altos salarios o grandes oportunidades. La disciplina, la paciencia y la sabiduría en las inversiones pueden llevarnos lejos. Hay mucha sabiduría que aprender de sus inversiones y sus experiencias de vida.

Espero que el contenido sea de utilidad e interés. Nos vemos en la próxima, ¡saludos!

Fuentes:



jueves, noviembre 21, 2024

La extraordinaria vida de Anne Scheiber: mujer pionera en las inversiones


Hoy traigo una historia de una mujer que logró una hazaña extraordinaria.

Anne Scheiber nació el 1 de octubre de 1893 en Brooklyn, Nueva York y murió el 9 de enero de 1995, es decir, vivió hasta los 101 años. Durante años trabajó como auditora para el IRS (siglas en inglés de Internal Revenue Service o "Servicio de Impuestos Internos"). En 1944 se retiró de su empleo, cuando tenía 51 años, y se centró en la gestión de su cartera de inversiones durante los siguientes 51 años de su vida. 

Scheiber nunca ganó un salario superior a los 4.000 dólares por año y, aunque fue una trabajadora ejemplar, nunca recibió un ascenso. Esto probablemente se debía a la discriminación hacia las mujeres en la fuerza laboral de la época, así como a las actitudes antisemitas endémicas en las instituciones estadounidenses de élite a mediados del siglo XX. Se dice que, al momento de retirarse tan solo tenía 5.000 dólares ahorrados y una pensión anual de unos 3.100 dólares.

En sus primeros años de vida adulta, en la década de 1930, Scheiber tuvo una serie de experiencias negativas con corredores financieros. Sin embargo, al dejar de trabajar pasó los siguientes 50 años estudiando los mercados y acumulando riqueza mientras vivía frugalmente en un apartamento tipo estudio con alquiler regulado en Nueva York. 

A pesar de la discriminación de la que fue objeto por ser mujer y judía, al momento de fallecer nuestra heroína sin capa tenía una cartera de acciones de dividendos por valor superior a los 22 millones de dólares, que le generaba más de 750 mil dólares en ingresos anuales por dividendos al momento de su muerte, lo que convierte a Anne Scheiber en una de las inversoras de dividendos más exitosas de todos los tiempos.

Scheiber tenía nueve hermanos, pero aparentemente tenía pocos familiares o amigos cercanos y nunca se casó. Fue criada por su madre, después de que su padre falleciera cuando ella aún era muy joven, tras perder dinero en inversiones inmobiliarias, por lo que comenzó a trabajar como asistente contable siendo una adolescente (tan solo tenía 15 años), para poder ganar dinero y así ayudar a su familia. A pesar de las dificultades de sus primeros años, Scheiber logró graduarse en la Facultad de Derecho, aunque luego decidió trabajar como auditora en el IRS, cuando tendría unos 32 años. Entre sus pocos allegados se encuentran un tal Ben Clark (su abogado) y William Fay (su corredor en Merrill Lynch).


A pesar de haber ganado millones con sus inversiones, Scheiber tenía reputación de frugalidad y excentricidad: se cuenta que una vez se llevó la comida de una reunión de accionistas a la que asistió y la consumió durante los siguientes tres días. Al final de su vida, vivía en el mismo apartamento y vestía la misma ropa que en 1944. ¡Este es el hábito de "vivir por debajo de sus posibilidades" llevado a su máxima expresión!

Aunque Anne Scheiber no haya tenido un alto salario u obtenido ascensos, aprendió mucho en su trabajo: por ejemplo, que los ricos tienden a invertir en la apreciación de activos que pagan flujos de caja. Si revisamos las declaraciones de impuestos, pronto nos daremos cuenta de que las personas ricas tienden a ser propietarias de muchas acciones que pagan dividendos, de bienes inmuebles que pagan alquileres y de negocios que les generan ingresos. Esta fue su epifanía, el momento ¡Eureka! que le inspiró a Anne a construir su riqueza a través de inversiones de primera clase. La lección que aprendió estudiando las declaraciones de impuestos de otras personas fue que la forma más segura de hacerse rico en América era invertir en acciones.

Según algunas historias, su cartera estaba valorada en 5.000 dólares al momento de su jubilación. Otras versiones hablan de declaraciones de impuestos más antiguas de la década de 1930 que mostraban un ingreso anual de dividendos por 900 dólares, que fue aumentando paulatinamente con el tiempo. Es posible que su cartera en el momento de su jubilación en 1944 estuviera cerca de $18.000 - $20.000, lo que implica una rentabilidad por dividendos del 4,5% - 5%. Sin embargo, sigue pareciendo impresionante que legara nada menos que 22 millones de dólares a la caridad al momento de su muerte. 

Su capital inicial fue el resultado de sus ahorros durante su carrera profesional, en un momento en el que muy pocos americanos poseían acciones. Es más más impresionante aún, si consideramos que en un momento perdió dinero invirtiendo en el mercado de valores, después de que la firma de corretaje con la cual hacía sus operaciones colapsó en la década de 1930, esfumándose su dinero. Esto fue antes de la aparición de la Securities Investor Protection Corporation ("Corporación para la Protección de Inversores en Valores"). Sin embargo, Anne Scheiber se recuperó y siguió invirtiendo el resto de su vida.

Según su abogado, tenía una tasa de ahorro muy alta, y así pudo acumular su capital inicial para construir su reserva de fondos. Llegó a ahorrar casi el 80% de su salario, lo cual es impresionante. Sus posiciones más importantes en 1995 eran las siguientes:

Las mayores posiciones de la cartera de Scheiber para 1995 (año de su muerte) en N° de acciones, precio al 11 de diciembre y porcentaje de ganancias. Destacan las empresas farmacéuticas (Schering-Plough, Bristol-Myers Squibb), consumo masivo (Pepsico, Coca Cola), retail (Loews), entre otras industriales (Rockeweel, Allied Signal), de servicios (Allewgheny Power System) y petroleras (Unocal, Exxon). Fuente: Dividend Growth Investor, Merrill Lynch, Benjamin Clark

Compró acciones de empresas cuyas actividades entendía, como farmacéuticas, de bebidas y de entretenimiento: su cartera incluía participaciones en más de 100 compañías, la mayoría de ellas nombres muy conocidos como Coca-Cola, PepsiCo, Schering-Plough y Bristol-Myers, entre otras, como observamos en la imagen superior, donde aparecen sus principales posiciones.

Anne se centró en empresas con marcas líderes que incrementaban sus beneficios con el tiempo. Esto aseguraba que el negocio pudiera pagar más en dividendos y aumentar el valor intrínseco.

Su estrategia fue comprar acciones regularmente, y mantenerlas durante décadas. Esto le permitió aprovechar al máximo el poder de la capitalización. Nunca vendió, porque odiaba pagar comisiones. Este fue otro movimiento inteligente, que le permitió aprovechar al máximo cualquier ganancia excesiva. Dejar que los ganadores corran durante décadas es lo que separa a los mejores inversores del mundo de aquellos que tienen carreras de inversión mediocres. 

Muy poca gente tiene la paciencia hoy en día para mantener las acciones durante meses, por no hablar de décadas. Pero esta paciencia es un rasgo que separa a los ganadores de los perdedores, porque da a las compañías tiempo para componer las ganancias, los dividendos y su valor intrínseco. Como sabemos, a veces las empresas no van a ninguna parte por un tiempo, lo que hace que muchos inversores se rindan y vendan, justo antes de que las cosas empiecen a cambiar. Al convertirse en un paciente inversor a largo plazo, usted estará bien posicionado para aprovechar los pocos ganadores de su bien diversificada cartera.

Ser un inversor paciente de comprar y mantener a largo plazo es beneficioso durante los mercados bajistas, cuando los precios de las acciones caen un 50% o más. Muchos se asustan por estas pérdidas temporales de la cotización, y venden con pánico. Los inversores inteligentes se aferran con fuerza e incluso aumentan sus posiciones si tienen capital disponible para hacerlo

Cuando nunca vendes tus acciones, tampoco tienes que pagar impuestos sobre las ganancias de capital a largo plazo. Si dejas tu cartera a la caridad, tampoco hay impuestos sobre el patrimonio. Es bastante seguro de que Anne disfrutó sabiendo que Hacienda tendría una tajada muy pequeña de su patrimonio en forma de impuestos.

Finalmente, Anne reinvirtió sus dividendos, lo que ayudó a aumentar aún más su capital y sus ingresos. En la década de 1980, comenzó a invertir sus considerables ingresos por dividendos en bonos municipales, que pagaban un 8% de interés anual libre de impuestos. Sus ingresos anuales de inversión de 750.000 dólares eran una mezcla de dividendos y ganancias.

La historia de Anne Scheiber es increíblemente inspiradora, ya que nos muestra claramente los pasos necesarios para lograr la independencia financiera, y moldear nuestro estilo de vida de la forma en que lo deseemos. Entre las lecciones que podemos aprender de su experiencia tenemos:

1. Invertir en marcas líderes en industrias líderes.

2. Invertir en empresas con beneficios crecientes.

3. Capitalizar sus intereses para descubrir oportunidades de inversión.

4. Invertir regularmente.

5. Reinvertir los dividendos.

6. Nunca vender las acciones.

7. Mantenerse informado sobre inversiones actuales o futuras.

8. Invertir de manera eficiente en materia de impuestos.

9. Devolver parte de las ganancias a la sociedad.

10. Ser frugal.

Este conjunto de principios puede ayudar a cualquier persona comprometida a terminar con una cartera de dividendos de muchos dígitos.

Es todo por el momento. Espero que el contenido sea provechoso y útil. Hasta la próxima, saludos!

Fuentes: 

Cómo Anne Scheiber ganó 22 millones de dólares invirtiendo en acciones con crecimiento de dividendos (The Finanzial).

- Serah Louis: ‘She ran rings around Warren Buffett’: This IRS auditor secretly turned a $5K nest egg into a $22M fortune — here are the 3 simple strategies that made Anne Scheiber rich (Yahoo Finance/moneywise).

- La enciclopedia libre: Anne Scheiber.

jueves, noviembre 14, 2024

Cómo hacer $30 mil millones a partir de $10 mil, según Warren Buffett

Warren Buffett, el "oráculo de Omaha".

Durante la reunión anual de accionistas de Berkshire Hathaway de 1999, un ambicioso asistente llamado Grant Morgan le planteó a Warren Buffett y Charlie Munger una pregunta convincente: 

"Si comenzaran de nuevo hoy, y tuvieran poco más de 30 años, ¿qué harían de manera diferente o igual en el entorno actual para replicar tu éxito? En resumen, ¿cómo puedo ganar 30.000 millones de dólares? [risas de la audiencia]"

La respuesta de Buffett no se centró en planes de enriquecimiento rápido ni en empresas arriesgadas. En cambio, reveló un plan atemporal para generar riqueza, enfatizando la importancia de comenzar temprano, aprovechar el interés compuesto y practicar una inversión disciplinada. El tío Warren explicó: 

"Charlie siempre ha dicho que lo más importante es que empezamos a construir esta pequeña bola de nieve en la cima de una colina muy larga. Empezamos a hacer rodar la bola de nieve desde una edad muy temprana. Y, por supuesto, la bola de nieve, la naturaleza de interés compuesto, se comporta como una bola de nieve pegajosa. El truco consiste en tener una colina muy larga, lo que significa empezar muy joven o vivir hasta ser muy viejo".

Un verdadero "dúo de historia": Warren Buffett y Charlie Munger.

Buffett luego detalló su estrategia si comenzara hoy:

"Lo haría exactamente igual si estuviera en un mundo de inversiones. Si hoy saliera de la escuela y tuviera 10 mil dólares para invertir, comenzaría con las A: empezaría a pasar por las empresas y probablemente a centrarme en las más pequeñas porque estaría trabajando con sumas más pequeñas y hay más posibilidades de que algo se pase por alto en ese ámbito".

Y añadió: 

"Hay que comprar empresas y sus pequeños negocios se llaman acciones. Hay que comprarlas a precios atractivos y hay que comprar buenas empresas".

Si bien algunos pueden sentir que el consejo cambiaría según las condiciones del mercado, Buffett aclaró que ese no era el caso. Explicó: 

"Ese consejo será el mismo dentro de 100 años con respecto a la inversión. De eso se trata".

Destacó la importancia del pensamiento independiente y la investigación exhaustiva. "No puedes esperar que nadie más lo haga por ti", dijo. Además, hizo hincapié en que la gente no compartirá valiosos consejos de inversión, por lo que las personas deben comprender sus propios conocimientos y limitaciones. "Hay que perseguirlo con mucha fuerza y ​​actuar en consecuencia cuando lo encuentre", añadió. También destacó la necesidad de pensar por uno mismo en lugar de buscar el acuerdo o la validación de los demás.


A pesar de haber sido pronunciado hace 25 años, el consejo de Buffett sigue siendo muy relevante hoy en día. Aunque teóricamente sencillo, enfatiza la importancia de comenzar temprano, pensar de manera independiente y mantener prácticas de inversión disciplinadas.

En su carta de 2016 a los accionistas de Berkshire Hathaway, Buffett escribió: 

“Cada década más o menos, nubes oscuras llenarán los cielos económicos y brevemente lloverá oro. Cuando ocurren aguaceros de ese tipo, es imperativo que salgamos corriendo con cubetas y no con cucharaditas”.

Buffett también ha dicho:

"Si no encuentras una manera de ganar dinero mientras duermes, trabajarás hasta que mueras".

La respuesta de Buffett es un recordatorio de que el camino hacia el éxito financiero, aunque requiere paciencia y una perspectiva a largo plazo, está al alcance de quienes estén dispuestos a aprender y actuar.

¿Qué nos enseñan los sabios consejos del viejo Warren?

1. La importancia de comenzar temprano a transitar tu camino en la formación de riqueza.

2. Una alternativa a comenzar temprano, es tener el objetivo de vivir muchos años durante los cuales puedas ahorrar e invertir tu dinero.

3. Una excelente opción es concentrarse en el mercado de acciones, buscando buenas empresas, que sean relativamente pequeñas (para crecer con ellas) y estén a buen precio.

4. Investiga exhaustivamente los mercados, ya que no todos estarán dispuestos a darte un buen consejo y la mayoría ni siquiera será capaz de hacerlo.

5. Desarrolla un pensamiento independiente, sin esperar por la validación de otros. 

Espero que el contenido sea de tu gusto y provecho. Nos vemos en una próxima entrega. Saludos.

Hecho con información de Yahoo Finance.

martes, noviembre 12, 2024

Franck Meyer, maratonista: 8 Claves para construir una mente fuerte

El mexicano Franck Meyer apenas tiene 20 años y a pesar de su corta edad, parece tener en sus manos las claves para el éxito y esto radica en construir una mente fuerte.

El maratonista mexicano, que se inició como piloto en el mundo del Karting y la Formula 4, fue mucho más allá cuando se encontró sin patrocinador para dar su siguiente paso en el automovilismo. Se reinventó y demostró cómo se pueden superar las dificultades. Encontró la ruta al éxito al completar el Maratón des Sables, una de las carreras más difíciles del mundo, según la revista GQ, ya que quienes participan en ella deben completar un recorrido de 252 kilómetros a través del desierto del Sahara, que desafía los límites físicos y mentales.

Este evento se considera una prueba de supervivencia en condiciones extremas. Cada participante debe ser autosuficiente, para lo que tiene que correr con una mochila que pesa cerca de 10 kg, donde cargan lo esencial para resistir el trayecto, bajo temperaturas por encima de los 50° C, en terrenos arenosos y desafiantes.

Para ganar la competencia, Franck Meyer se sometió a un entrenamiento intenso en el que no solo se preparó físicamente para atravesar el desierto del Sahara con temperaturas de hasta 50 grados, como cita Forbes, sino que también trabajó para construir una mente fuerte que le ayudara a superar las dificultades.

“Tener una mente fuerte es crucial para lograr tus objetivos porque te permite mantener la motivación y el enfoque, superar los desafíos y adaptarte a las dificultades. Una mente resiliente te ayuda a mantener la disciplina y el compromiso, incluso cuando la motivación se desvanece”.

Durante su preparación para el maratón y durante su carrera como piloto de karting, Meyer aprendió que hay elementos clave que ayudan a fortalecer la mente y que ayudan a “superar desafíos incluso cuando suenan imposibles”:

“La fortaleza física y la fortaleza mental están profundamente conectadas. Durante mi preparación para el Marathon des Sables, comprendí que cuando mi cuerpo estaba agotado, era mi mente la que me empujaba a seguir adelante”.

 


Las claves para construir una mente fuerte

1. Establecer una meta clara

“Establecer una meta clara es el primer paso para cualquier éxito. Tener una visión definida proporciona la dirección y motivación necesarias para superar los desafíos. Mi recomendación es comenzar con una idea muy general y, poco a poco, buscar algo específico que te ayude a lograrlo. Una vez que encuentres ese objetivo, es mucho más fácil establecer pequeñas metas o un plan que te llevarán a alcanzar tu gran visión”...

A esto, agrega:

“Visualizar tus objetivos y el camino hacia ellos no solo te da energía y determinación, sino que también te prepara para adaptarte a las circunstancias cambiantes sin perder de vista tu objetivo final. Esta claridad y persistencia son fundamentales para convertir los sueños en realidad”.

Establece una meta y busca algo específico que te ayude a lograrlo. Si “visualizas tus objetivos y el camino hacia ellos”, tendrás energía, determinación y te adaptarás a las circunstancias cambiantes sin perder de vista la meta.

Muchos expertos están de acuerdo con este punto, ya que, cuando partes de una meta clara y tienes una visión establecida, entonces puedes saber por dónde moverte, qué necesitas para lograr esa meta, cuáles son tus prioridades e incluso puedes establecer límites de forma más efectiva. Sin una meta clara, es fácil perderte en el camino o renunciar al no tener un objetivo claro que te motive a seguir luchando.

2. Mantener la simplicidad y humildad

“La simplicidad y la humildad son fundamentales en el camino hacia el éxito. Mantener las cosas simples permite concentrarnos en lo esencial y ser más eficiente, mientras que la humildad nos mantiene abiertos a aprender de los demás. Reconocer que siempre hay algo nuevo por aprender me ha permitido mejorar continuamente, formar relaciones significativas y recibir valiosos consejos”.

El argumento de la humildad se apega a lo que dice Bill Gates sobre la importancia de rodearnos de las personas correctas, de nunca pensar que lo sabemos todo, seguir buscando conocimientos, aprendizaje y formas de crecer, ya que eso es lo que nos va a ayudar a seguir avanzando y mejorando con el paso del tiempo.

Así que reconocer cuando se comete un error y aceptar los consejos de las personas que te rodean para adquirir nuevos conocimientos es una forma de crecer y seguir avanzando hacia el éxito.

Por otro lado, al mantener las cosas simples, puedes tener más orden en tu trabajo, entrenamiento o en lo que sea que hagas, lo que ayuda a tener más claridad sobre las cosas que haces y necesitas diariamente, y a eliminar todas esas cosas que solo te distraen y complican todo.

3. Tener disciplina y compromiso

Si lo que haces se vuelve aburrido o monótono entonces se pierde el interés y se evade, pero en palabras de Meyer hacerlo “sin ganas es mejor que no hacerlo”, así que aquí entra la disciplina y el compromiso. Aceptar el aburrimiento forma parte de avanzar y no como algo que te detenga.

“Sé que se dice mucho, pero la disciplina es fundamental para alcanzar tus metas. Cuando empecé a entrenar para el maratón, estaba emocionado, corría por nuevos caminos, exploraba y disfrutaba cada momento. Pero la emoción no dura para siempre. No importa que tanto te guste hacer algo, eventualmente se vuelve monótono y aburrido, pero es mucho mejor hacerlo sin ganas, que no hacerlo. Esta disciplina te convierte en una persona más resiliente y fuerte, y es lo más importante para lograr tus objetivos”.

La palabra resiliencia se repite en muchas historias y casos de éxito, al igual que la disciplina, que es lo que te ayuda a construir esos buenos hábitos, a hacer esas cosas que te dan beneficios, incluso cuando son aburridas o cuando te cansan un poco. Lo importante es que aceptes ese aburrimiento como parte de la vida, y que no dejes que sea el factor que te detenga.

4. No quedarnos en el mismo lugar

Salir de la zona de confort puede generar incomodidades pero esto también ayuda a crecer:

“En la vida, hay más incomodidad que comodidad, y eso es lo que hace que las pequeñas victorias se sientan tan fantásticas y especiales”.

5.  Adaptarse y aceptar a la incomodidad

“Todos intentamos evitar la incomodidad, y es comprensible. Pero es algo que puede ser muy valioso y creo que estar un poco incómodo te lleva a ser más feliz. Correr en la arena con una mochila de 10 kg fue muy doloroso, pero cada vez que completaba la distancia que debía cubrir ese día, me sentía increíble al acabar. En la vida, hay más incomodidad que comodidad, y eso es lo que hace que las pequeñas victorias se sientan tan fantásticas y especiales”.

En el camino al éxito también podemos sentirnos incómodos a veces, en especial cuando salimos de nuestra zona de confort, pero es esa incomodidad la que nos obliga a crecer, a no quedarnos en el mismo lugar por demasiado tiempo y a buscar formas de que todo se vuelva mejor y más fácil.

6. No dejar que las críticas te detengan

Si alguna persona sugiere que no podrás alcanzar o cumplir una meta, o que simplemente es algo que no se puede hacer, déjalo de lado pues esas críticas pueden acabar con tu sueño sin haber empezado.

Cuando Jeff Bezos tomó la decisión de transformar Amazon en una plataforma de ventas, que ya no se dedicara a los libros, muchas personas le dijeron que no lo hiciera, que lo que ya tenía era muy bueno y que sería casi imposible cumplir esa idea que tenía, peor él no dejó que eso lo frenara y ahora es uno de los hombres más exitosos del mundo.

De acuerdo con Meyer, es importante que no dejes que esas críticas externas te detengan, te frenen o te alejen de una idea o un sueño sin haberlo intentado primero.

7. Hay que reírse

“A veces, ya sea por el estrés, la rutina o la carga laboral, nos olvidamos por completo de reír. Es impresionante cómo una simple sonrisa puede cambiar por completo nuestro día, darnos un push y hacernos sentirnos más positivos frente a los desafíos”.

Y hay algo de ciencia detrás de todo esto. De acuerdo con Verywell Mind, la risa tiene muchos beneficios, como mejorar tu sistema inmune, aumentar la longevidad, ayudar a reducir el dolor, reducir el estrés y mejorar los síntomas de depresión.

8. Ten confianza en ti mismo

“Si no te la crees, no va a pasar”.

No vas a llegar a ningún lado si crees que no puedes hacerlo y dejas que eso te detenga, así que hay que trabajar en la seguridad confiar en los instintos y en las propias fortalezas, ya que eso es lo que te va a permitir enfrentarse a situaciones difíciles y te va a ayudar a luchar por ti mismo y por lo que quieres.

¿Qué puedo aprender de la experiencia de Franck Meyer?

Actualmente estamos sumergidos en una epidemia de apatía. El día a día nos mantiene en una espiral sin fin de conformismo y acontecimientos banales: trabajamos sin una meta trascendente, para consumir redes sociales y servicios de streaming. En ese contexto la fortaleza y resistencia para obtener resultados extraordinarios no pueden prosperar. 

Historias como la de Franck Meyer nos indican que aplicando algunos principios clave es posible lograr experiencias motivadoras que desafían nuestras capacidades:

1. Establece una meta.
2. Mantenlo simple y sé humilde.
3. Ten disciplina y compromiso.
4. Sal de tu zona de confort.
5. Acepta a la incomodidad.
6. No dejes que las críticas te detengan.
7. ¡Ríete!
8. Ten confianza en ti mismo.

Espero que el contenido sea de tu agrado. Nos vemos en una próxima oportunidad, saludos.

Créditos a:

- GQ: 7 consejos para tener una mente fuerte y llegar al éxito, según un ultramaratonista.

- El Universo: Cómo construir una mente fuerte que supere dificultades y encuentre el éxito y la riqueza: 5 claves vitales de un maratonista.

- Forbes México: De las pistas de carrera al Desierto del Sahara: la inspiradora transformación de Franck Meyer.

sábado, noviembre 09, 2024

5 Pilares de Andrew Huberman para mejorar tu desempeño


El neurocientífico y profesor de la Universidad de Stanford, Andrew Huberman, revela los hábitos principales con los que se consigue un mayor rendimiento.

Internet está lleno de consejos rápidos y soluciones fáciles para mejorarnos. Gran parte del contenido que prolifera en pódcasts y redes sociales son consejos más o menos cortos, de supuestos expertos que prometen velozmente transformar tu vida, generalmente con el menor esfuerzo.

En este terreno insidioso, Andrew Huberman destaca con un nivel superior y más confiable que el promedio. Profesor de Neurobiología y Oftalmología en Stanford Medicine y presentador del podcast Huberman Lab, Andrew es un destacado científico, y se ha convertido en la fuente más buscada para optimizar la vida con base en protocolos científicos. Sin embargo, a pesar de que es hijo de padre argentino, aún no posee una versión en español de su página en Wikipedia (aunque sí tiene una versión en español de su podcast en Youtube).

No se puede llegar al éxito si no aprendemos a ser productivos, y eso es independiente al tipo de trabajo que tengamos o al éxito que estamos buscando, y es por esto que muchos expertos hablan de hábitos, rutinas y hasta rituales que van más allá de simplemente sentarse a trabajar y dedicar largas horas a los pendientes de la oficina.

Aumentar la productividad y el éxito al mismo tiempo es posible, pero depende de cómo hagamos las cosas y de entender que ser productivo no se trata de trabajar más, no tomar descansos y de estar enfocados siempre en el trabajo.

Es un hecho que nuestro cuerpo y mente deben estar bien para que podamos trabajar bien, para tener energía, motivación, para poder controlar el estrés y para lidiar con cada reto que se presente.

Para mantener un buen nivel de productividad y estar en las mejores condiciones para realizar los esfuerzos necesarios para alcanzar el éxito y dar los pasos que nos ayudarán a cumplir nuestros objetivos, entonces hay que trabajar en la salud física y mental. Huberman dice que para eso hay algunas claves que él mismo ha adoptado en su propia rutina diaria.

Este neurocientífico entiende muy bien que ser productivo no significa ser un robot o una máquina que solo sabe trabajar. Las personas realmente productivas no son las que se pasan las 24 horas del día pensando en trabajo, sino las que atienden las áreas más importantes de su vida y respetan los buenos hábitos que les ayudan a estar al 100%.

El paso más importante hacia una salud física y mental sólida es cuando nos damos cuenta de que ningún protocolo, suplemento de programa o receta va a resolverlo por sí solo y, en cambio, iniciamos una serie de acciones diarias hacia un bienestar persistente. Esas acciones son (y siempre serán): 1) dormir, 2) ver la luz del sol (incluso a través de las nubes), 3) movimiento (entrenamiento cardiovascular, de resistencia y de movilidad; no necesariamente todo en el mismo día), 4) nutrición de calidad (contenido, cantidad de tiempo), 5) conexión social, incluida la conexión consigo mismo”.

Todo lo que dice Huberman ha sido confirmado por distintos estudios de otras universidades y expertos. 

Huberman considera que estos son los cinco pilares de una vida sana. Aunque la mayoría son evidentes, no está de más recalcar en ellos y entender por qué son tan importantes. Veamos a continuación con más detalle cada una de las recomendaciones del neurocientífico y podcaster: 

1. Sueño: Huberman enfatiza que dormir las horas suficientes es el mejor aliviador de estrés, liberador de trauma, potenciador inmunológico y estabilizador emocional. Recomienda establecer una rutina de descompresión antes de dormir, mantener horarios regulares de sueño y asegurar un ambiente oscuro y fresco para mejorar la calidad del descanso.

Dormir bien es algo que Bill Gates también ha recomendado, ya que ayuda a que tu cerebro descanse y a que puedas ser más creativo, pensar con claridad, lidiar mejor con el estrés, tener una memoria fuerte y más energía física y mental.

2. Luz Solar: La exposición a la luz solar, especialmente por la mañana, es crucial para regular el ritmo circadiano del cuerpo. Esto no solo ayuda a despertar al cuerpo, sino que también facilita un mejor descanso nocturno. Además, la luz solar es una fuente esencial de vitamina D, vital para fortalecer los huesos y el sistema inmune, y potencialmente beneficiosa para la función cerebral y la memoria.

Exponerse a la luz del sol ayuda a regular tu sueño, pero también mejora el estado de ánimo, la concentración, el sistema inmune y muchas otras cosas más. 

3. Movimiento: La actividad física regular es fundamental para mantener el cerebro y el corazón saludables y para reducir el estrés. Huberman sugiere incorporar una combinación de resistencia, movilidad y cardio en la rutina semanal, acorde con las pautas estadounidenses que recomiendan al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada a vigorosa por semana, complementados con entrenamiento de fuerza.

El ejercicio y a la actividad física permiten mantener un cuerpo saludable, pero también es bueno para la salud mental, el manejo del estrés y hasta para trabajar la autoestima.

4. Nutrición: Adoptar una dieta equilibrada rica en una variedad de alimentos integrales, como frutas, verduras, nueces, semillas y legumbres, es crucial. Estos alimentos no solo nutren y mantienen el cuerpo saciado por más tiempo, sino que también fortalecen el microbioma intestinal, mejorando la función inmune y cerebral. Huberman también reconoce los beneficios del ayuno intermitente, que puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, obesidad y diabetes.

Una buena nutrición afecta tanto a tu cerebro como a tu cuerpo, te da energía para funcionar correctamente, e incluso puede afectar tu estado de ánimo y salud mental.

5. Conexión Social: En un mundo donde la soledad se ha convertido en una epidemia, mantener conexiones sociales sólidas es esencial para la salud mental. Estar socialmente conectado puede reducir el riesgo de demencia, depresión y ansiedad, y es tan vital para nuestra salud como la dieta y el ejercicio. Participar en voluntariado, grupos de actividades o hobbies puede fortalecer este sentido de conexión.

La conexión social es uno de los elementos más importantes para la felicidad, según apunta también un estudio de Harvard, pero también para la longevidad, además de que te permite hacer Networking, tener mentores, aprender de los demás y tener una red de apoyo. 

Más allá de buscar soluciones mágicas o productos milagrosos, Huberman propone centrarse en cinco pilares fundamentales para fortalecer tanto la salud mental como física: sueño, luz solar, movimiento, nutrición y conexión social. Estos 5 pilares no solo ayudan a mejorar el desempeño laboral y la productividad, sino que también te ayudarán a vivir más años y con mayor calidad de vida. 

Andrew Huberman agrega que esta lista de hábitos es solo la base, pero que siempre puedes agregar más cosas para cubrir tus necesidades individuales.

Espero que el aporte sea valioso. Nos vemos en una próxima ocasión. Saludos!

Créditos a: Luis Alberto Hara (Pijama Surf) y Paloma González (GQ).

martes, noviembre 05, 2024

William Vanderbloemen: Cómo ser un líder más productivo

William Vanderbloemen es un autor, conferencista y consultor estadounidense especializado en liderazgo, gestión de equipos y desarrollo organizacional. Es el fundador y presidente de Vanderbloemen Search Group, una empresa de búsqueda y selección de talentos para organizaciones sin fines de lucro y empresas.

Vanderbloemen es conocido por su experiencia en liderazgo efectivo, desarrollo de equipos, cultura organizacional, reclutamiento y selección de talentos y gestión de cambios. Ha escrito varios libros sobre liderazgo y gestión, como "Next: Pastoral Succession That Works" (2014) y "Search: The Pastoral Search Committee Handbook" (2016). Vanderbloemen es teólogo y pastor protestante, además es conferencista frecuente en eventos y conferencias sobre liderazgo y gestión; ha sido entrevistado en medios como Forbes (donde además tiene una excelente columna/blog), Fast Company y CNN. En su experiencia ha sabido combinar los valores éticos junto con una apropiada comprensión de los rpocesos empresariales, lo que nos recuerda al gran Stephen Covey.

Su enfoque se centra en ayudar a las organizaciones a encontrar y desarrollar líderes efectivos, y a crear culturas organizacionales saludables y productivas. En el libro Be the Unicorn: 30 Traits, Practices, and Mindsets of Exceptional Leaders ["Sea el unicornio: 30 características, prácticas y esquemas mentales de líderes excepcionales"], Vanderbloemen se centra en identificar y desarrollar las características y habilidades que distinguen a los líderes fuera de la regla. El título (Be the Unicorn) se refiere a la idea de que los líderes excepcionales son como unicornios, muy difíciles de encontrar y bastante valiosos. El libro presenta 30 rasgos, prácticas y mentalidades que Vanderbloemen ha identificado como clave para el éxito en el liderazgo.

Dirigido a líderes emergentes, gerentes y directivos, emprendedores y profesionales que buscan crecer en su carrera, algunos de los principios tratados en el libro incluyen: (1) la autenticidad y la vulnerabilidad, (2) la visión y el propósito claro, (3) la comunicación efectiva, (4) la resiliencia y la adaptabilidad, (5) el trabajo en equipo y la colaboración, (6) el crecimiento y el desarrollo personal, (7) la productividad y la eficiencia, así como (8) el liderazgo servicial y humilde. Todos temas muy importantes en la labor de conducir un equipo. Vanderbloemen sostiene que cualquier persona puede desarrollar estas características y convertirse en un líder excepcional, independientemente de su posición o título.


Be the Unicorn ofrece consejos prácticos y ejemplos reales para ayudar a los lectores a desarrollar las habilidades y mentalidades necesarias para convertirse en líderes excepcionales. Vanderbloemen identifica 12 rasgos basados en datos (data-driven) que moldean un estilo específico de liderazgo y que separan a los mejores líderes del resto:

1. La velocidad (The Fast, el rápido): es la capacidad para tomar decisiones rápidas y efectivas. La desarrollan líderes decididos, capaces de tomar decisiones informadas de manera oportuna y diferenciando lo urgente de lo que no lo es.

2. La autenticidad (The Authentic, el auténtico): se refiere a un liderazgo genuino y transparente. La despliegan líderes genuinos, transparentes y honestos consigo mismos y con otros, capaces de crear un ambiente laboral positivo y colaborativo al admitir errores y aprender de ellos, inspirando confianza en su entorno.

3. La agilidad (The Agile, el ágil): es la habilidad para adaptarse a cambios. Esta característica es común en líderes flexibles y adaptables, capaces de responder hábilmente a los desafíos del día a día.

4. La resolución (The Solver, el solucionador): es el hábito de resolver problemas complejos. La desarrollan los líderes dedicados a encontrar soluciones a los desafíos que se les presentan de manera efectiva, rechazando ser víctimas y enfocando su energía en superar los obstáculos.

5. La anticipación (The Anticipator, el anticipador): es la capacidad para prever y prepararse para el futuro. Líderes que se anticipan a los acontecimientos y tendencias para configurar sus objetivos.

6. La preparación (The Prepared, el preparado): se refiere al liderazgo que es proactivo y organizado. Son líderes dispuestos a tomar la iniciativa y estructurar un orden para influir en los acontecimientos. 

7. La autoconciencia (The Self-Aware, el autoconsciente): es la comprensión profunda de sí mismo y de sus limitaciones. La desarrollan líderes que comprenden sus fortalezas y debilidades.

8. La curiosidad (The Curious, el curioso): es la apertura a aprender y crecer. La practican líderes que tienen disposición a vivir nuevas experiencias y aprender de ellas.

9. La conexión (The Connected, el conectado): es la habilidad para construir relaciones efectivas. 

10. La simpatía (The Likable, el agradable): se refiere al liderazgo agradable y respetado. Son líderes que construyen relaciones fuertes y basadas en la comprensión del otro.

11. La productividad (The Productive, el productivo): es la capacidad para lograr resultados eficientes. Líderes que establecen prioridades y cumplen plazos.

12. El propósito (The Purpose-Driven, el impulsado por un propósito): es el liderazgo dirigido por un propósito claro. Son líderes enfocados en una meta fundamental preestablecida.

Estos 12 rasgos se basan en el análisis exhaustivo de datos y en experiencias reales de líderes exitosos, no son exclusivos, y muchos líderes exitosos los combinan de manera bastante efectiva. Vanderbloemen afirma que desarrollar estos rasgos puede ayudar a cualquier líder a convertirse en un "unicornio" – un líder excepcional.

La productividad como carácter esencial del liderazgo

Uno de los rasgos más difíciles de desarrollar en el liderazgo es la productividad. En un mundo lleno de distracciones, saber cómo mejorar la productividad es un activo de incalculable valor.

Efectivamente, ser productivo es una de las fortalezas más codiciadas en el mundo actual, tan copado de elementos que desvían la atención (notificaciones de correo electrónico y apps, redes sociales y móviles inteligentes). Solo el 5,72% de los miles de encuestados por Vanderbloemen a lo largo de los años se identificaron como prominentemente productivos.

¿Qué podemos aprender de los líderes que destacan con el rasgo de la productividad? Veamos:

- Hay una diferencia entre ser productivo y simplemente estar ocupado; las personas productivas son muy conscientes de ello.

- Una persona productiva es alguien que produce de manera eficiente (mayor cantidad) y efectiva (empleando menos tiempo y recursos).

- Utilizan inteligentemente su tiempo y recursos (materiales y humanos) para alcanzar sus objetivos.

- Por lo general, tienen su propio sistema o trucos de productividad, perfeccionados a lo largo de una vida de ensayo y error.

Los unicornios productivos, esos seres poco comunes que alcanzan cotas de productividad poco acostumbradas para el común de la gente, se caracterizan por lo siguiente: (1) han descubierto cómo trabajar de manera óptima para maximizar su productividad; (2) establecen objetivos diarios alcanzables y objetivos a largo plazo desafiantes; (3) es probable que se frustren con personas que no trabajan con la misma rapidez y eficacia que ellos (lo que plantea un desafío personal para sobrellevar esa situación); (4) a menudo prefieren trabajar solos en lugar de en equipos (lo que pudiera representar obstáculo para el trabajo en equipo).

Algunos "trucos de productividad"

Una de las razones por la que la productividad es tan importante es que puede ser medida; todos los gerentes saben que lo que se mide se hace, y permite que todo el equipo se vea bien. Establecer objetivos diarios alcanzables así como objetivos a largo plazo puede prepararte para el éxito al enfrentar el día y avanzar en los indicadores de carrera.

Otro desafío común para la productividad es la adicción a los teléfonos móviles: las pantallas y redes sociales pueden ser grandes consumidores de tiempo. Desafíate a ti mismo a pasar períodos cada vez más largos sin usar tu teléfono. Si necesitas un compañero de responsabilidad, te garantizo que tus hijos estarían encantados de separarte de tu teléfono. ¿No tienes hijos? Establece límites de tiempo en tus aplicaciones.

Otro "truco de productividad" tiene que ver con eliminar esa lista interminable de tareas que mata la productividad. Un caballero llamado Ivy Lee diseñó un método para maximizar la productividad del equipo ejecutivo del magnate del acero Charles Schwab ayudándoles a enfocarse en menos para hacer más. Simple y útil, el Método Ivy Lee contempla lo siguiente:

- Comienza por escribir las seis cosas más importantes que debes hacer hoy. 

- Luego, ordenas la lista para trabajar de arriba a abajo; algunas personas prefieren empezar con las tareas que requieren menos tiempo, mientras que otras comienzan con los proyectos más grandes. 

- A continuación, trabajas en la lista

- Por último, vas tachando las tareas a medida que las completas. Y luego repites el proceso al día siguiente.

Ivy Lee fue un publicista y consultor estadounidense que vivió entre 1877 y 1934. Es considerado uno de los pioneros en el campo de las relaciones públicas y la comunicación corporativa. Famoso por desarrollar el "Método Ivy Lee" para mejorar la productividad, que consiste en: (1) escribir las 6 tareas más importantes del día, (2) ordenarlas por prioridad, (3) trabajar en cada tarea secuencialmente y (4) tachar cada tarea al completarla. Además de su contribución en productividad, Ivy Lee también es conocido por ser un pionero en la creación de departamentos de relaciones públicas en empresas.

Una opción de lista de tareas que también puede ser efectiva es agrupar todas las cosas que debes hacer por áreas de tu vida. Por ejemplo: "tareas para el trabajo", "tareas para el hogar", "tareas para mí". Muchas personas tienen su propio sistema preferido de listas de tareas y estrategias de productividad. Ya sea que utilices aplicaciones, recordatorios por correo electrónico o papel y pluma, no importa cómo lo hagas, sino que lo hagas regularmente.

Otros trucos para ser más productivo son:

- Desglosar tus tareas grandes en tareas más pequeñas y manejables.

- Conocer tus distracciones y cómo evitarlas.

- Dejar el modo multitasking ("multitareas", hacer varias cosas al mismo tiempo)  y enfocarte en una cosa a la vez.

- Si puedes hacer outsourcing ("tercerizar" o delegar algunas tareas), hazlo.

- Asegúrate de trabajar en tus propios términos para maximizar lo que puedes lograr. 

- Finalmente, ten en cuenta la productividad de los demás manteniendo las reuniones enfocadas y breves. A todos les gusta una agenda enfocada. Elon Musk detesta las reuniones demasiado extensas y todos los que hemos sido empleados conocemos la famosa frase de "esta reunión podía haber sido un e-mail".


Habiendo explorado algunas tácticas de superar los desafíos, veamos las recompensas o incentivos. Algunos argumentan que la cultura de "pequeños premios" ha ido demasiado lejos, pero si un café después del trabajo es el incentivo que necesitas para hacerlo, estoy a favor de ello. Tómate un tiempo para identificar lo que te ayuda a mantener la motivación cuando trabajas. Tal vez no sea un premio, quizás solo sea una descarga precisa de dopamina que obtienes al tachar algo de la lista de tareas o la sensación de satisfacción que obtienes después de un trabajo bien hecho.

La productividad es uno de los rasgos más difíciles de aprender si no eres naturalmente bueno en ello. Pero cualquiera es capaz de mejorar, poniendo en práctica algunas de las estrategias que se han presentado. Seguir tu propia productividad te ayudará a mantenerte responsable, ilustrar qué métodos funcionan mejor para ti y proporcionar una métrica útil para tu revisión de fin de año.

Estos consejos te ayudarán a construir productividad y tu propia reputación como miembro valioso del equipo. Espero que el contenido sea de tu agrado y utilidad. Nos vemos en la próxima, saludos.

Morgan Housel y "La Pisocología del Dinero" (XIII)

Sigo adelante con la traducción del artículo del economista Morgan Housel, que le dió origen a su libro homónimo, que ha sido todo un éxito ...