lunes, enero 27, 2025

Morgan Housel y "La Psicología del Dinero" (XIX) - Creencias Políticas y Finanzas

Continúo con la penúltima entrega de la traducción del artículo del economista Morgan Housel, "La Psicología del Dinero", en el cual desarrolla 20 falacias sobre nuestra relación con el dinero. Veamos: 

19. Political beliefs driving financial decisions, influenced by economics being a misbehaved cousin of politics.

[19. Creencias políticas que impulsan las decisiones financieras, influenciadas por el hecho de que la economía es la prima malcriada de la política.]

I once attended a conference where a well known investor began his talk by saying, “You know when President Obama talks about clinging to guns and bibles? That is me, folks. And I’m going to tell you today about how his reckless policies are impacting the economy.”

[Una vez asistí a una conferencia donde un conocido inversionista comenzó su charla diciendo: “¿Sabes cuando el presidente Obama habla de aferrarse a las armas y a las Biblias? Ese soy yo, amigos. Y hoy les voy a contar cómo sus políticas imprudentes están impactando la economía”.]

I don’t care what your politics are, there is no possible way you can make rational investment decisions with that kind of thinking.

[No me importa cuál sea su política, no hay forma posible de tomar decisiones de inversión racionales con ese tipo de pensamiento.]

But it’s fairly common. Look at what happens in 2016 on this chart. The rate of GDP growth, jobs growth, stock market growth, interest rates – go down the list – did not materially change. Only the president did:

[Pero es bastante común. Mire lo que sucede en 2016 en este gráfico. La tasa de crecimiento del PIB, el crecimiento del empleo, el crecimiento del mercado de valores, las tasas de interés (vamos a continuación en la lista) no cambiaron materialmente. Sólo el presidente lo hizo:]

Índice de Confianza Económica Anual de los Estados Unidos, por Partido.

Years ago I published a bunch of economic performance numbers by president. And it drove people crazy, because the data often didn’t mesh with how they thought it should based on their political beliefs. Soon after a journalist asked me to comment on a story detailing how, statistically, Democrats preside over stronger economies than Republicans. I said you couldn’t make that argument because the sample size is way too small. But he pushed and pushed, and wrote a piece that made readers either cheer or sweat, depending on their beliefs.

[Hace años publiqué un montón de cifras sobre el desempeño económico del presidente. Y enloqueció a la gente, porque los datos a menudo no coincidían con lo que pensaban que debería ser según sus creencias políticas. Poco después, un periodista me pidió que comentara una historia que detallaba cómo, estadísticamente, los demócratas presiden economías más fuertes que los republicanos. Dije que no se podía argumentar así porque el tamaño de la muestra es demasiado pequeño. Pero presionó y presionó, y escribió un artículo que hizo que los lectores se alegraran o sudaran, dependiendo de sus creencias.]

The point is not that politics don’t influence the economy. But the reason this is such a sensitive topic is because the data often surprises the heck out of people, which itself is a reason to realize that the correlation between politics and economics isn’t as clear as you’d like to think it is.

[La cuestión no es que la política no influya en la economía. Sino que la razón por la que se trata de un tema tan delicado es que los datos a menudo sorprenden muchísimo a la gente, lo que en sí mismo es una razón para darse cuenta de que la correlación entre política y economía no es tan clara como nos gustaría pensar.]

¿Qué puedo aprender de lo anterior?

- Hay un sesgo según el cual ciertas creencias políticas impulsan las decisiones financieras, motivado por el hecho de que la economía y la política están estrechamente emparentadas: "las finanzas son un arma, la política es saber cuándo apretar el gatillo", como dice don Lucchesi, un personaje de la película El Padrino.

Don Licio Lucchesi, Presidente de Inmobiliare (la compañía de bienes raíces más grande del mundo, según la ficción de El Padrino III), conoce a Anthony Corleone en Italia y le dice una frase de antología: "Las finanzas son un arma. La política es saber cuándo disparar".

- Lo cierto es que no hay forma posible de tomar decisiones de inversión racionales siendo un extremista de las opiniones políticas. Aunque puedan ser primas hermanas, lo cierto es que lo mejor es mantener una mentalidad fría cuando se trata de involucrar alegremente a la política y a la economía.

- Esto se debe a que los datos de la realidad a menudo no coinciden con lo que dictan las creencias políticas de las personas. Cegarse por las opiniones políticas nubla el entendimiento y afecta el entendimiento de la realidad.

- En definitiva, la cuestión no está en que la política influya o no en la economía. Sino que dejar que esto pase indiscriminadamente puede hacer que los datos a menudo terminen sorprendiéndonos, indicando que la correlación entre política y economía no es tan clara como nos figuramos.

Es todo por hoy. Espero que el contenido sea de utilidad e interés. ¡Hasta la próxima!

Links de interés:

The Psychology of Money (artículo original de Morgan Housel, en inglés).

Parte XVIII de la serie.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

DISCURSOS: En Defensa del Internacionalismo - Angelina Jolie (I)

Inauguro una nueva sección del blog, en la que publicaré, transcribiré o traduciré discursos a los que considero debemos prestar atención, b...